Zaida Catalán estaba desaparecida desde el 12 de marzo y ayer se encontró su cadáver.
Versiones indican que ella y el estadounidense Michael Sharp fueron secuestrados por una milicia local.
Zaida Catalán era hija de un chileno que se estableció en Suecia huyendo de la dictadura. Tenía doble nacionalidad.
Zaida Catalán, una abogada de 36 años con doble nacionalidad, chilena y sueca, fue asesinada en la República Democrática del Congo mientras participaba en una misión de la Organización de las Naciones Unidas.
Catalán estaba desaparecida desde el 12 de marzo, cuando, junto al también funcionario ONU Michael Sharp, de nacionalidad estadounidense, fue -aparentemente- secuestrada por milicianos del difunto líder tradicional Kamuina Nsapu, uno de los grupos armados activos en la mencionada nación africana.
La muerte de ambos fue confirmada vía comunicado por el propio secretario general de la ONU, António Guterres: "Me entristece profundamente confirmar que los restos mortales descubiertos por las fuerzas de paz de la Misión de Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (...) son los de Michael Sharp (EE.UU.) y Zaida Catalán (Suecia)".
"Envío mis sinceras condolencias a las familias, queridos y compañeros de Michael y Zaida. Ambos perdieron la vida intentando entender las causas del conflicto y la inseguridad en la RDC para traer paz al país y a su pueblo", explicó.
El diplomático portugués dijo que la organización honrará la memoria de ambos "apoyando el trabajo sin precio del Grupo de Expertos y toda la familia de la ONU" en el país africano.
Asimismo, exigió a las autoridades congoleñas una "investigación en profundidad", e indicó que "Naciones Unidas hará todo lo posible para asegurarse de que se haga justicia".
Trabajo de derechos humanos
Según consignó la agencia EFE, Sharp y Catalán eran miembros de un grupo de expertos creado por la ONU para vigilar las sanciones impuestas al Congo por el Consejo de Seguridad.
Ambos desaparecieron el 12 de marzo junto a su intérprete congoleño y a tres conductores mientras investigaban violaciones de los derechos humanos en Kananga, la capital de la Provincia de Kasai Central, en la zona central del país.
El paradero del resto de los secuestrados aún se desconoce y, en dicho sentido, la ONU urgió a las autoridades congoleñas a que "sigan buscando".
La ONU tiene desplegada desde 1999 una misión sobre el terreno (denominada "Monusco") para contribuir a la estabilización del país, inmerso en un frágil proceso de paz desde su más reciente guerra (1998-2003).
Recientemente, Human Rights Watch (HRW) pidió a las autoridades que investiguen "de forma imparcial" las ejecuciones de milicianos por militares en esta región, tras la difusión en internet de un video en el que efectivos de las Fuerzas Armadas congolesas tirotean a al menos 13 supuestos milicianos armados con palos y hondas.
El pasado julio, una ola de violencia a gran escala estalló en la provincia de Kasai Central y se expandió posteriormente a las vecinas Kasai y Kasai Oriental, donde murieron unas 280 personas.
Hija de exiliado, activista política en Suecia
En una carta enviada al diario sueco Aftonbladet la mamá de Zaida Catalán dijo que ella era "la mejor y más cariñosa hija que una madre puede tener".
Tanbién recordó que su padre, ya fallecido, "era un refugiado político que fue torturado tras el golpe militar en Chile".
Según destaca su página de LinkedIn, Zaida Catalán fue una de las líderes de las juventudes del Partido Verde de Suecia entre 2001 y 2005, ejerció como abogada dentro de esa formación y dejó luego la política por una carrera que la llevó a trabajar, entre otros, para la misión policial de la UE en Afganistán (EUPOL).
El Gobierno y destacadas figuras políticas suecas han lamentado durante las últimas horas su deceso. El primer ministro socialdemócrata Stefan Löfven la elogió en un comunicado por su "incansable" trabajo por la paz y la justicia, y demandó que la ONU y las autoridades congoleñas investiguen el caso para hallar a los culpables.
Los líderes de su socio de coalición en el poder -el Partido del Medio Ambiente-, Gustav Fridolin e Isabella Lövin, destacaron en un escrito conjunto "su lucha por un mundo más justo" y su compromiso con los derechos humanos, sobre todo de las mujeres. La calificaron como un "ejemplo" cuya memoria será recordada.
En unas declaraciones a medios suecos, Fridolin, que compartió liderazgo de las Juventudes ecologistas con Catalán, la definió como "una persona muy inteligente" con una gran iniciativa y que estaba dispuesta a "dedicar su tiempo en la tierra a hacer del mundo un lugar un poco mejor".
Los líderes de los principales partidos políticos lamentaron también la muerte de la experta de la ONU, un hecho "muy trágico" según la líder conservadora, Anna Kinberg Batra.
Condolencias de la Cancillería
El canciller Heraldo Muñoz expresó sus condolencias a través de una declaración publicada en la página web del Ministerio de Relaciones Exteriores.
"Mis más sentidas condolencias por el trágico fallecimiento de Zaida Catalán, compatriota chilena y sueca. Estamos con la familia y amigos de Zaida en este momento de profunda tristeza", dijo Muñoz desde Suiza, donde se encuentra junto a la Presidenta Bachelet.
El jefe de la diplomacia chilena destacó que Catalán, de 36 años, perdió la vida "sirviendo los valores de la democracia y los derechos humanos que aprendió de su madre sueca y de su padre exiliado en Suecia durante los años oscuros de nuestro país".
"Su memoria vivirá entre quienes la quisieron y entre quienes, como nosotros, admiramos su sacrificio y compromiso humanitario", agregó Muñoz, según la nota.
