Magaly Castillo fue arrestada el pasado 1 de agosto en el Aeropuerto de Ezeiza.
Los peritajes policiales confirmaron que el artefacto "era una antigüedad".
Castillo pasó varios días detenida en Buenos Aires.
La Justicia de Argentina decidió sobreseer el caso de Magaly Castillo, la mujer chilena de 42 años que el pasado 1 de agosto fue detenida en el Aeropuerto de Ezeiza portando una granada de mano.
El juez federal Jorge di Lorenzo tomó la resolución tras recibir el resultado de los peritajes realizados por la policía argentina, que indicaban que el artefacto no tenía cargas explosivas ni estaba en condiciones de estallar.
"Junto con el comprobante de compra, a partir de las pericias hechas por gente especializada de la Policía Federal, se estableció que era una réplica de una granada de mano explosiva; es decir, era una antigüedad", explicó abogada defensora, Déborah Lichtman.
Magaly Castillo, agrónoma y gerente regional de marketing de la empresa israelí NaanDan Jain, fue liberada el 7 de agosto tras pasar una semana detenida e incomunicada en la Cárcel de Ezeiza, en Buenos Aires.
Su situación se complicó debido a que la Policía de Seguridad Aeroportuaria hizo estallar, de manera precautoria, el artefacto, lo que dificultó que se dilucidara con certeza si se trataba de un artefacto explosivo o de un objeto de colección de la Primera Guerra Mundial, como sostenía Castillo.
En este caso, "por supuesto, las autoridades han cumplido con su deber de proteger la seguridad, pero, por otro lado, si esto hubiese sido analizado en el momento indicado, por gente indicada, nos hubiésemos evitado (esto) y, sobre todo, se hubiese evitado a mi asistida el mal rato", comentó la abogada Lichtman.
