Todavía hay bastante potencial en el mercado chino para los vinos chilenos, destacó Alberto Siegel, director de la Asociación de Viñas de Colchagua, una de las zonas vitivinícolas más importantes del país sudamericano y cuarto exportador de vinos en el mundo.
"El consumo per cápita (en China) aún es bajo y con una población tan grande, 1.400 millones de habitantes, hay un potencial de crecimiento grande todavía en el mercado", afirmó a Xinhua el líder gremial del valle de Colchagua, quien subrayó que, para Chile, el mercado chino es el "más importante".
"Tiene mucho potencial de consumo. El vino chileno es muy conocido y yo diría que es el segundo país más importante después de Francia en el mercado", dijo.
Agregó que el consumidor chino ya conoce "muy bien" el vino chileno. "Sabe que tiene muy buena calidad. Hay muy buenas relaciones diplomáticas también entre ambos países, eso también ayuda mucho al desarrollo de los productos", explicó.
El pasado fin de semana se celebró una vendimia en la comuna de Santa Cruz, en la Región de O'Higgins,una zona vitivinícola por excelencia en el país.
"Es una oportunidad para los consumidores, para los turistas que vienen de todas las ciudades, para la comunidad aquí del valle poder tener un fin de semana con muchas actividades, probar muy buenos vinos", detalló sobre la vendimia.
Siegel encabeza la Asociación de Viñas de Colchagua, que agrupa a 20 viñas de este territorio, que completa unas 20.000 hectáreas de plantaciones.
"El valle de Colchagua es uno de los principales valles, yo diría que junto al valle del Maipo son de los valles más importantes, más emblemáticos y que entregan la mayor calidad en cuanto a vino dentro de todos los valles que conforman el panorama vitivinícola en nuestro país", afirmó.
Siegel detalló que la cepa "más emblemática" del valle de Colchagua es el carmenere, producida con una variedad de uva plantada originalmente en la región de Médoc de Burdeos, Francia, y que desapareció de Europa a causa de una plaga.
Fue encontrada en Chile por el enólogo francés Jean Michel Boursiquot en 1994 y, a la fecha, el 80 por ciento es producido en el país sudamericano, y se ha transformado en uno de los sellos de esta nación.
Sobre el valle de Colchagua, subrayó que su imagen está "muy bien establecida, muy bien posicionada".
"A nivel mundial se conoce ya por los consumidores, los diferentes mercados. Es un valle muy visitado también por los distintos turistas alrededor del mundo, ya que rincones espectaculares, viñas muy bonitas que hacen muy buenos vinos, buenos hoteles, buenos restoranes. Por lo tanto, también hay un muy bien enoturismo desarrollado", complementó.
Las exportaciones de vino chileno embotellado cerraron 2022 con un descenso moderado, pese al complicado y desafiante escenario internacional, señaló en un estudio la organización Vinos de Chile en febrero pasado.
La entidad indicó que en 2022 se exportaron 53,3 millones de cajas de vino embotellado al exterior, un retroceso de 0,6 por ciento frente al año anterior.
China mantuvo el primer lugar en valor, con 6,6 millones de cajas por 231,7 millones de dólares mientras que Chile es el cuarto exportador mundial de vinos, superado solo por países europeos de vasta trayectoria en materia vitivinícola como Francia, España e Italia.