Bush abandonó Chile tras un agitado fin de semana en Santiago
La presencia del mandatario estadounidense no pasó inadvertida, tanto por las actividades propias de la cumbre APEC, como por el masivo rechazo que le manifestó parte de la ciudadanía.
La presencia del mandatario estadounidense no pasó inadvertida, tanto por las actividades propias de la cumbre APEC, como por el masivo rechazo que le manifestó parte de la ciudadanía.
A las 07:45 horas (10:45 GMT) despegó desde el Aeropuerto de Pudahuel el "Air Force One" que traslada al presidente de Estados Unidos, George W. Bush, tras participar en la cumbre de líderes del Foro de Cooperación Económica del Asia-Pacífico (APEC).
El mandatario, quien realizó una visita oficial al país tras el fin de la cumbre, partió con destino a Colombia, donde se reunirá con su homólogo colombiano, Alvaro Uribe.
El despliegue de seguridad incluyó suspender momentáneamente el tránsito de los vehículos que abandonaban el aeropuerto.
La situación provocó la molestia de los automovilistas, quienes espontáneamente abuchearon y tocaron las bocinas a la comitiva que trasladaba al mandatario estadounidense.
Bush y la acogida que tuvo en Chile
George W. Bush aterrizó en Santiago el viernes 19, cerca de las 20:50 horas (23:50 GMT) y fuera de los recibimientos de protocolo, la ciudad le dio la "bienvenida" con una multitudinria marcha que, además de protestar contra la política neoliberal que promueve APEC, buscó mostrar el rechazo por la presencia del líder estadounidense.
Carabineros cifró la convocatoria entre 50.000 y 60.000 personas, y pese a que terminó con desmanes y enfrentamientos de encapuchados con fuerzas policiales, la manifestación tuvo un carácter pacífico.
Entre las actividades con las que el Gobierno pretendía acoger al líder, se vio obligado a cancelar las invitaciones a una cena oficial que iba a ofrecer el domingo al presidente Bush.
En su lugar, se efectuó una cena de trabajo entre ambos mandatarios, debido a que el Gobierno rechazó las extremas medidas de resguardo que la seguridad de Bush tenía previstas para el encuentro, como la meticulosa revision de los invitados.
Ya en la noche del viernes, algunos chilenos seguían haciendo patente su rechazo a la presencia de Bush. Dos funcionarios de Carabineros y un civil resultaron heridos de bala durante la madrugada en protestas en Villa Francia, en Estación Central y La Victoria, al sur de la capital, contra la visita a Chile del presidente estadounidense.
El sábado en la noche, en tanto, los custodios del presidente estadounidense se enfrentaron con Carabineros, cuando a su ingreso a la cena oficial en el Centro Cultural Estación Mapocho, seis guardaespaldas trataron de entrar junto a él, lo que fue impedido por funcionarios policiales que estaban a cargo de la seguridad del recinto.
Mientras Bush y Lagos se saludaban y se tomaban fotos acompañados de sus esposas en el vestíbulo del centro cultural, en la puerta sus guardaespaldas se daban empujones con los carabineros, tratando de seguir a su jefe.
El mandatario estadounidense se percató de la situación y regresó a la puerta para rescatar a uno de sus guardias, que finalmente pudo seguirlo.
Luego de tantas manifestaciones de rechazo de los cuales probablemente el mandatario no se enteró y de incidentes varios, en la reunión bilateral que sostuvo en La Moneda con Ricardo Lagos, además de valorar que el país conozca la importancia de la libertad económica, el presidente Bush dijo que "Chile es un país increíble. Son un pueblo de buen corazón que atesora su libertad. Están dedicados a la democracia".