El gobierno de Estados Unidos renovó el programa Visa Waiver, que permite a los chilenos viajar sin visa a ese país, pero solo por un año, según confirmaron el Ministerio del Interior y la Cancillería a El Mercurio.
El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, afirmó que el beneficio que originalmente regía por dos años se vio suspendido por una serie de omisiones y retrasos en la implementación de medidas durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet.
"Estados Unidos hizo sucesivas observaciones respecto de los compromisos incumplidos por Chile para su permanencia en el programa (...). Para entenderlo mejor, se mostró una tarjeta amarilla, advirtiendo que, de no implementar las medidas correctivas, Chile podría ser expulsado del programa", detalló.
El titular de Relaciones Exteriores, Teodoro Ribera, dijo al matutino que para lograr que los chilenos viajen con fines turísticos a EEUU "nos hemos preocupado de fortalecer las medidas de seguridad a niveles acordes con los requeridos".
Las deudas del Gobierno
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha extendido la presencia de Chile en el programa de forma provisional desde el 2017 hasta el 2019, por su preocupación con los pasaportes genuinamente emitidos, pero conseguidos mediante fraude que fueron utilizados para viajar a EEUU.
Pero el país estaba al debe en otras materias: hubo complicaciones para implementar el sistema de información Advanced Passenger Information (API), acordado para operar desde el 1 de julio de 2018, y no hubo avances en la cooperación en materia de refugio y asilo, según Ubilla.
La óptima evaluación de este año se logró a través de distintas medidas del Gobierno, como la aprobación del acuerdo sobre oficiales de seguridad a bordo de aeronaves (IPSO), y la licitación e instalación de los sistemas para API y el Personal Name Record (PNR).
Además, designó un oficial de la PDI permanente en el Registro Civil, aumentó la dotación de detectives en la oficina policial de la Cancillería, adoptó medidas de control que evitan nuevos casos de suplantación de identidad y aparentemente, responde con mayor prolijidad los cuestionarios de EEUU.
"Esto significa que vamos por buen camino y, de seguir avanzando en los compromisos adquiridos, la evaluación a Chile volverá a ser cada dos años, ingresando así al grupo de países que están en la categoría superior, de donde nunca debimos haber salido", añadió el subsecretario.
