Las conversaciones comenzaron el año 2010 y no dieron fruto durante la administración Piñera.
Michelle Bachelet analiza el tema, pero no lo tiene como "prioridad".
Obama prometió en su campaña de 2008 el cierre de Guantánamo, compromiso que aún no ha podido concretar.
El Gobierno de Barack Obama ha enviado cuatro solicitudes a Chile desde el año 2010 para que reciba a presos de la cárcel de Guantánamo, ubicada en Cuba.
Según recuerda este lunes el diario La Tercera, el primer acercamiento que tuvo la Casa Blanca con La Moneda en relación con esta materia fue durante el primer año de Gobierno de Sebastián Piñera.
La petición se basó principalmente en el envío de dos personas pertenecientes a un grupo étnico de China que fueron encerradas en Guantánamo por enfrentarse con el gobierno asiátic, "cargos que nunca fueron comprobados por la justicia norteamericana".
Durante el 2012 existieron nuevos intercambios verbales, "pero, al igual que las conversaciones que se efectuaron dos años antes, no arrojaron resultados positivos para la Casa Blanca. En esa oportunidad los prisioneros fueron enviados a otros países".
La tercera solicitud se realizó en los últimos meses de la administración de Piñera. "A diferencia de las otras peticiones, esta se efectuó con un tono más formal y con reuniones de por medio", dice el matutino.
La petición fue denegada por Piñera "por no querer hacerse cargo de recibir a detenidos provenientes de Guantánamo ante un eventual cambio de Gobierno".
La administración de la Presidenta Michelle Bachelet se encuentra analizando la última solicitud que llegó desde Estados Unidos para recibir a cuatro prisioneros.
Sin embargo, "el proceso es largo y Guantánamo no está dentro de las acciones prioritarias del Gobierno", ha dicho el canciller Heraldo Muñoz.
En el caso de que Chile acoja la solicitud de la Casa Blanca las personas que eventualmente lleguen a nuestro país quedarían inmediatamente en libertad. "Esto se debe a que tales reos no han enfrentado ninguna condena ni proceso judicial", apunta La Tercera.
Barack Obama prometió durante su primera campaña presidencial -en 2008- que su gobierno cerraría la prisión ubicada en territorio cubano, pero la promesa se ha visto complicada por la falta de una definición para ubicar a los 149 presos que residen en ese centro de detención.
La administración Obama inició hace un par de años un proceso de diálogo con varios países del mundo y, dentro de los latinoamericanos, El Salvador y Uruguay ya han aceptado recibir a prisioneros, mientras Perú está estudiando la solicitud de EE.UU.
