El canciller Roberto Ampuero confirmó que se reunirá junto a sus pares del Grupo de Lima este lunes 15 de abril, en Santiago, para realizar un seguimiento de la situación que vive Venezuela.
A través de un video, el ministro de Relaciones Exteriores aseguró que "el escenario en Venezuela ha empeorado" por los cortes de servicios básicos y "un creciente hostigamiento contra el presidente encargado Juan Guaidó" y su gabinete.
"Ante esto, es necesario que el Grupo de Lima avance hacia una nueva fase, redoble su trabajo para conseguir que nuevos actores internacionales se sumen a la presión contra la dictadura, para que Venezuela recupere su democracia", estimó.
Sin embargo, el canciller se manifestó en la misma línea que siempre ha tenido esta agrupación, y sin hacer mención de una intervención militar: "Chile reitera su compromiso con una salida pacífica y diplomática a la grave crisis que se vive en ese país hermano".
Guarequena Gutiérrez, representante en Chile del autodesignado presidente encargado de Venezuela, señaló que "todo lo que en este momento pueda sumar a que Venezuela retome la democracia, para que en Venezuela se respete el libro constitucional, para que en Venezuela cese la usurpación da un gobierno de transición y, finalmente, podamos ir a unas elecciones libres, unas elecciones que cuenten con garantías electorales de estándares internacionales, es importante".
Sobre la posibilidad de enviar soldados estadounidenses a Venezuela, el presidente estadounidense, Donald Trump, sostuvo a CBSNews en febrero que "no quiero decir eso. Pero ciertamente es algo que está... es una opción".
En la cita de mañana, los cancilleres tendrán que discutir el fracaso de sus insistentes llamados para que Nicolás Maduro deje el gobierno y permita nuevas elecciones, y de la reunión en la localidad fronteriza de Cúcuta, en que buscaban la entrada de la ayuda humanitaria a Venezuela.
En este misma línea, el reconocimiento constitucional de la Asamblea Nacional y de Juan Guaidó, apoyado por cerca de 52 naciones, no ha llegado a buen puerto, mientras miles de venezolanos emigran de esa nación caribeña en busca de mejores horizontes.