Los productos no se pueden consumir.
Los pescadores están muy preocupados por la situación.
La extensión de moluscos en descomposición se calculó en cinco kilómetros.
Más de 5.000 machas vararon en la playas de Cucao, Huentemó y Chanquín en la isla grande de Chiloé, lo que causó la alarma y el desconcierto entre los pescadores artesanales de la comuna de Chonchi, Región de Los Lagos.
El fenómeno fue confirmado por la Armada y se produjo en dos oportunidades durante esta semana y los moluscos no pueden ser consumidos porque portan la toxina paralizante de la marea roja.
Tras la alerta de los pescadores, una patrulla de la Capitanía de Puerto de Chonchi recorrió la zona y calculó en cinco kilómetros la extensión de moluscos en descomposición y también se encontraron almejas y jaibas, pero en menor cantidad.
El capitán de Puerto de Chonchi, teniente Miguel Ángel Bravo, señaló que "había una aproximación estimada de cinco kilómetros del recurso macha, en su mayoría en estado de descomposición, sin embargo, había macha también que había viva".
"Hoy en la mañana hicimos otro patrullaje, en conjunto con la Municipalidad de Chonchi, que dispuso medios con objeto de retirar, si era necesario, los recursos que estaban descompuestos, y nos percatamos que ya la mayoría del recurso había sido devuelto al mar por la misma altura de marea", añadió el teniente Bravo.
En relación a la causa de este fenómeno, el director regional de Sernapesca, Eduardo Aguilera, explicó que "esto se enmarca en el mismo ámbito de esta afloración de algas nocivas que es posible que exista presencia de otras toxinas que estén generando la mortalidad".
"Existe una hipótesis, por un lado, en cuanto a las machas, que podría tratarse de un adormecimiento del músculo de la macha, que hace que finalmente se suelta, se sale de la arena donde está enterrada y queda en la superficie. Lo que pudimos observar en terreno era que muchas de estas machas estaban muertas", agregó.
Los pescadores artesanales solicitan a las autoridades que se declare zona de catástrofe a la isla grande de Chiloé y contar así con recursos que permitan enfrentar la cesantía en la zona.
Alberto Naín, presidente de la Asociación de Pescadores Indígenas del sector de Chanquín, llamó a la Presidenta Michelle Bachelet y al ministro del Interior, Jorge Burgos, a escuchar las demandas de más de mil personas que se ven afectadas por esta situación.
"El mensaje al ministro del Interior y a la Presidenta Bachelet es que ellos por favor nos escuchen, nos hagan valer en este minuto (...) Hoy en día nuestra población en el sector de Cucao, somos una población de 1.200 personas, y estamos todas en la misma postura. A lo mejor se mira solamente a los extractores de machas, pero estamos todos afectados porque somos una sola familia en el sector Cucao", dijo el dirigente.
Una situación similar a la de Chonchi también se registró en el sector de Mar Brava, en la comuna de Ancud, donde pescadores artesanales alertaron de la muerte de machas y cangrejos, entre otros.
