Luego del debate y las expectativas que generaron los comentarios de la ministra de Salud, Helia Molina, sobre la inminente salida de la marihuana de la lista de drogas "duras" de la repartición sanitaria, la personera aclaró que aunque el decreto que facilitaría la modificación está listo para ser firmado por la Presidenta Michelle Bachelet, esta no es una "prioridad".
"Dentro de lo que es el programa de Salud de la Presidenta Bachelet no es una prioridad. Tengo algunos expertos revisando el tema para ver en realidad cúal es el costo - beneficio de trabajar ese aspecto", indicó la secretaria de Estado.
Molina sostuvo que se trata de "un tema intersectorial" y aunque no habló de plazos, dijo creer "que sí se va a considerar".
Entre los cambios que supone la salida de la marihuana de la lista 1 del Ministerio de Salud que alude a las drogas llamadas "duras", está la utilización de la cannabis para utilizar sus beneficios en medicamentos aprobados por organismos internacionales, facilitando la vida de los enfermos que la requieren con fines terapéuticos.
Fiscal nacional: Vamos a aplicar la ley
Otro escenario derivado de la remoción de la marihuana desde la lista de drogas duras, es que se dejará de perseguir penalmente a quienes consuman o que la porten para consumo personal, ante lo cual el fiscal nacional Sabas Chahuán, fue cauto para evaluar el rol que le compete como ente persecutor.
"Nosotros como fiscalía vamos a aplicar la ley. Estamos en la misma sintonía que lo dicho por el Senda en el gobierno anterior y lo que se dice actualmente, en cuanto a que no se puede y no se debe perseguir penalmente a los consumidores. Por ende, que la marihuana se estime por parte de un organismo técnico que pueda ser despenalizada eventualmente, nos parece que debe ser discutida en el parlamento", sostuvo.
Aunque se trate sólo de "ciertos aspectos", Chahuán aclaró que "actualmente el consumo personal de la marihuna está despenalizado".
Aunque no incluye la venta de la planta en su estado natural, los expertos concuerdan que se está caminando por la vía de la despenalización y no de la legalización como indicaron desde la Fundación Paréntesis, donde respaldan el debate.