Madre y hermano de Juan González acusaron que "se contagió en el hospital".
Se espera que el ISP entregue durante la presente jornada el resultado de las pericias realizadas, para confirmar el agente causal.
Los dos trabajadores del departamento de mantención del recinto fallecieron infectados, aparentemente, por una meningococcemia.
Este lunes se conocerán los resultados de la autopsia de los dos trabajadores fallecidos del departamento de mantención del Hospital Clínico de la Universidad de Chile "José Joaquín Aguirre" infectados, aparentemente, por una meningococcemia.
Los fallecidos fueron identificados como Mario Francisco Morales Pardo, de 46 años, y Juan González Pérez, de 49, y se espera que el Instituto de Salud Pública entregue durante la presente jornada el resultado de las pericias realizadas, pasa confirmar el agente causal.
Morales vivía en Puente Alto y se desempeñaba como cerrajero, falleció en el Hospital Sótero del Río durante la noche del viernes. Mientras que González residía en la comuna de Renca y trabajaba en el área mecánica del hospital, falleció la tarde del sábado en la Clínica Dávila.
Su madre Colina Pérez y su hermano Guillermo González rechazan totalmente la versión del hospital, que descartó que se deba a una infección intrahospitalaria. Acusaron que la víctima trabajaba de las 08:00 horas a 20:00 horas, al punto que no participaba de reuniones sociales. Incluso señalaron que utilizaba su vehículo para movilizarse, descartando cualquier tipo de contagio en el transporte público.
"Se contagió en el hospital. O sea, lo están mirando como un perro. Trabajaba de 08:00 a 20:00 horas", criticó la madre.
En paralelo, el hermano de González aseveró que "fue una cuestión muy fulminante. Entró a las 11:00 horas caminando a la clínica y a las 13:00 horas lo pasaron a la UCI con su totalidad de órganos comprometida. Y a las 15:45 hora tuvo un paro y no lo resistió. Voy a seguir hasta las últimas consecuencias peleando por lo que creo justo y pienso que están tapando el sol con un dedo".
Recomendaciones
La presidenta del Colegio de Infectólogos, Jeanette Dabanche, señaló que la bacteria neisseria meningitidis vive en la faringe del 3 y 5 por ciento de las personas sanas. Sus enfermedades causantes, la meningitis o la meningococcemia, pueden ser evitadas con acciones básicas como la ventilación de las habitaciones y también el lavado de manos.
"Para que esta transmisión se produzca las personas tienen que estar en un contacto bastante estrecho, es decir, no es cualquier contacto ocasional con alguien que es portador de la bacteria. Contacto estrecho es vivir fundamentalmente en un lugar cerrado, por eso es más frecuente en el invierno, no bien ventilado, muchas horas de contacto cercano. Consideramos un contacto cercano de riesgo más allá de cuatro o cinco horas con una persona o que enferma o que es portadora de la bacteria", explicó.
