Se trabaja en un plan para darle más seguridad a los profesionales.
Facultativos han sufrido agresiones verbales y fisicas, además de amenazas con armas de fuego.
Un 50 por ciento de los médicos generales de zona se siente "inseguro" en su trabajo.
El Ministerio de Salud anunció la presentación de querellas por las agresiones sufridas por médicos en los hospitales de Marchigüe, Loncoche y Yungay durante los últimos días.
Desde el Ejecutivo confirmaron que se trabaja en un plan ante la inseguridad de los facultativos, quienes han sufrido agresiones verbales y fisicas y amenazas con armas de fuego por parte pacientes y sus familiares.
La ministra Carmen Castillo repudió el hecho y anunció apoyo para casos puntuales y el reforzamiento de la seguridad en los centros hospitalarios.
Castillo explicó que se debe "generar un plan de seguridad para los establecimientos hospitalarios y de la atención primaria, para asegurar que en estos casos no se vuelvan a repetir las situaciones que se han vivido".
En paralelo, una encuesta realizada por la directiva nacional de los médicos generales de zona entregó como resultado que el 50 por ciento de estos profesionales se siente inseguro en su lugar de trabajo.
Jorge Vilches, presidente de la instancia, comentó que "los centros de salud no son seguros para los usuarios, que son los pacientes, ni para los equipos de salud. Que por ejemplo una persona pueda entrar con un arma de fuego a un centro de salud en donde también concurren mujeres embarazadas, adultos mayores, niños, puede poner en riesgo la vida de las personas, no solamente de los equipos de salud".
Médico relató ataque
Uno de los médicos afectados, Karl Noack, del Hospital de Yungay, indicó que "uno de ellos comienza a gritar de que hace mucho tiempo él tenía un dolor. En ese momento yo me doy cuenta que ambos tenían un hálito alcohólico, cuando le digo que tengo que ir a examinarlo él saca una pistola de entre sus calzoncillos y pantalones y me apunta".
"Me dice que si él no recibe una atención digna me va a disparar", recordó.
Posteriormente, el doctor recibió un cabezazo por parte del acompañante del paciente, por lo que interpuso una querella. Los atacantes quedaron en libertad y cumplen con medidas cautelares.
