Patricio Fernández, superintendente de Salud durante el segundo Gobierno de Sebastián Piñera, aseguró que las multimillonarias pérdidas que han reportado las isapres son "consecuencia de algo que ya venía hace tiempo" y dan cuenta de que éste "es un sistema que en el tiempo es muy débil", porque la realidad "ya no es la misma" respecto a la época pre pandemia.
En conversación con El Diario de Cooperativa, el abogado se refirió a las pérdidas que han informado las aseguradoras privadas de salud en los últimos 18 meses, que superan los 200 mil millones de pesos: "Llegan a esa cifra porque el año 2021 registraron pérdidas por más de 150 mil millones de pesos -así terminaron en diciembre el 2021-; y el primer semestre del 2022 tienen pérdidas por 73 mil millones de pesos y la proyección que se tiene para este año supera los 200 mil millones de pesos de pérdidas; (es decir) sólo el 2022 sería más (que) los 150 mil del año 2021, ésa es la realidad financiera (de la industria)", detalló.
¿Cómo llegan a esta situación? Fernández explicó que la razón es "multifactorial: han tenido incremento en las licencias médicas, se retomó la actividad asistencial post pandemia; tuvieron muchas ganancias en la primera ola de pandemia porque las personas no hicieron uso de las prestaciones en salud, pero después se retomó esa actividad; la no reajustabilidad de los planes por más de dos años; se aprobó por ley la licencia postnatal parental de emergencia, que fueron cerca de 100 y tanto mil millones".
"SE ROMPIÓ EL EQUILIBRIO"
Pese a lo anterior, la exautoridad de Salud sostuvo que esto "es una consecuencia de algo que ya venía hace tiempo: el año 2019 -que fue el último año 'normal' antes de la pandemia- las isapres tuvieron ganancias por 9.000 millones de pesos, y eso coincide con el precio de venta del edificio corporativo de una isapre -que fue lo que hizo Cruz Blanca-, por lo tanto, es un sistema que en el tiempo es muy débil desde este punto, porque ya no es la misma realidad de ese año".
Hace años se viene incrementando "el tema de la judicialización: ha habido cambios, pero no ha habido cambios estructurales normativos, entonces cuando eso no pasa, los costos en salud aumentan y después no puedes pretender seguir pasando a precio todo...".
"Toda alza, las costas, etcétera, incrementaban los precios de los planes, y llega un punto donde se rompió el equilibrio; digo: la gente ya no puede seguir pagando más y bajando las coberturas, entonces ahí se genera un problema si es que no hay un cambio estructural, un cambio que apunte a modernizar" el sistema.
EL "SUPREMAZO"
En este contexto, Fernández analizó el "supremazo" -así lo calificó- de la semana pasada: la decisión de la Corte Suprema de suspender las alzas anuales de 7,6 por ciento para todos los afiliados al sistema.
"A lo que estábamos acostumbrados en las sentencias de la Corte Suprema en relación a las alzas de precio era que se aplicaba al efecto relativo, es decir, que rigen solamente para el caso por el cual se pronuncian. (En cambio) acá hubo 12 fallos que se pronunciaron respecto a la totalidad de las isapres abiertas y también generando efectos para todo el proceso de reajustabilidad", apuntando a la "ilegalidad y arbitrariedad en relación a la comunicación de las isapres a la Superintendencia de Salud en cuanto a señalar el porcentaje que iban a alzar".
"Eso es una innovación, porque hace asimilable a las isapres, al ser instituciones de seguridad social, lo que se le exigiría a un órgano de la administración del Estado en cuanto a fundar su acto; es decir, la falta de fundamento (del incremento) fue lo que atacó", explicó Fernández.
Respecto al dinero que ya fue cobrado en esta alza, el jurista inidicó que "se tienen que reintegrar como excedente o como exceso", lo que, a su juicio, debería "ser automático", sin la necesidad de acciones particulares de los afiliados.
"Eso tiene que ser regulado por la Superintendencia a través de una circular, no se le puede imponer a las personas hacer ningún trámite extra para eso", señaló.