Ximena Aguilera confirmó que las aseguradoras privadas no podrán retirar utilidades mientras no hayan pagado lo adeudado a los usuarios.
Con el acuerdo logrado en la Comisión Mixta, la ministra espera que no se registren quiebras, aunque es necesario apoyo por parte del sector privado.
La ministra de Salud, Ximena Aguilera, descartó en Cooperativa que la ley corta de isapres constituya un "perdonazo" para las aseguradoras privadas, ya que la deuda "está completa" y se instalan varios mecanismos para que les restituyan a los usuarios afectados los montos cobrados de más, en el marco del inmimente cumplimiento del fallo de la Corte Suprema sobre las tablas de factores de riesgo.
En conversación con El Diario de Cooperativa, Aguilera recalcó que "efectivamente lo que nosotros estamos planteando es una arquitectura que da estabilidad al sistema y que por lo tanto da probabilidades de que no existan quiebras masivas. La industria tiene que poner de su parte, se le está exigiendo que mejore la eficiencia, que haga propuestas de reducción de costos y a cambio de eso se les posibilita un alza extraordinaria, que tiene techo y existen distintos otros mecanismos de manera que puedan tener una forma de pago más eficiente y que eso les lleve a reducir costos".
"Si hay esfuerzo de la industria, toda esta arquitectura permite dar estabilidad y evitar una quiebra sistémica", valoró.
Aguilera insistió: "¿Cómo va a haber perdonazo si está la deuda completa y están los mecanismos para pagarlos? Justamente se agregó la posibilidad del pronto pago, es decir que las isapres incluyan la posibilidad de pagar en efectivo con una tasa de descuento convencional a las personas en una sola vez o en el momento en que la persona lo solicite y la isapre lo pueda realizar de acuerdo a la liquidez".
"Mientras mantengan la obligación de deuda con las personas a las que les hicieron cobros en exceso, no van a poder retirar utilidades (...) eso es durante todo el periodo en que tengan una deuda con las personas a las que les hicieron cobros en exceso y tienen que presentar los antecedentes a la Superintendencia una vez que extingan esa deuda, y en esa situación van a poder iniciar el retiro de utilidades", recalcó.
La titular de Salud subrayó que "hay un incentivo a que la industria establezca mecanismos para adelantar los pagos, por eso está el tema del pago en efectivo, el tema de los bonos, de manera que haya un incentivo a la industria".
Entre lo aprobado destacó la reciente indicación del Gobierno que establece que las isapres puedan pagar la deuda a los afiliados, por lo cobrado en exceso al aplicar tablas de factores diferentes, en un plazo de 13 años: tres años más de lo que se proponía en un principio.
No obstante, habrá prioridad para los ancianos: los mayores de 80 años recibirán las restituciones en 24 meses, y los mayores de 65 años, hasta cinco años.
El texto incluyó también la posibilidad de que las isapres ofrezcan una devolución anticipada y en efectivo a cambio de un descuento, que no podrá superar la tasa máxima convencional. La deuda a 13 años, por su parte, no generará intereses.
Pero lo que finalmente allanó el acuerdo, que fue casi unánime, es la disposición que habilitará a las aseguradoras privadas a adecuar los precios de sus planes base sin un mecanismo de contención dentro del Indicador de Costos de la Salud (ICSA, el "IPC" de la salud), en los próximos tres reajustes anuales: es decir, las alzas podrán ser mayores a las acostumbradas durante los siguientes tres años, a fin de dar a las isapres una herramienta que les permita equilibrarse financieramente.
Tras un año de trámite legislativo, la ley corta será votada el lunes por la tarde en la Sala del Senado, y una hora después será el turno de la Cámara de Diputadas y Diputados.
En el día después de la sesión de la comisión mixta, el senador Iván Flores (Democracia Cristiana) fustigó hoy que "el arreglo fue un traje a la medida de las isapres y la derecha fueron sus defensores. Lo que no logro entender es la conformidad del Gobierno y, aunque es claro que se le termina el lío, no es como para que agradezcan el acuerdo. Fue demasiado; definitivamente, un perdonazo y punto".
En tanto, el senador Juan Luis Castro (Partido Socialista) consideró "inaceptable" que las próximas tres alzas anuales sean mayores a las que antes eran normales: "Se aprobaron dos cosas que yo no compartí, que el ICSA quedó fijado en rango alto por tres años más, y eso es al bolsillo de las personas, y por otro lado, la prórroga a 13 años para pagar la deuda. Y uno se pregunta: ¿habrá isapres en 13 años? Ojo, no todo está dicho o resuelto aún".
Por su parte, el senador y presidente de la comisión mixta, Javier Macaya (UDI), aseguró que "hay que tener muy presente que, si no somos capaces en los próximos meses de generar la adecuaciones legales, en el programa de Gobierno está establecido, por parte de las personas de este Gobierno, que las isapres se terminan. Creo que hoy día se ha, al menos, evitado en parte eso".
"Yo le pregunto, ahora, a los chilenos que son usuarios del sistema de isapres si saben cuánto le debe su isapre, si están con alguna pretensión de cobro, pensando no quizá en su bolsillo, sino que pensando en la continuación de prestaciones", agregó el timonel gremialista.
Su correligionario Henry Leal, diputado, recordó que "nos gustaba otro camino, nos gustaba el camino de la mutualización porque eso garantizaba que esta actividad siguiera en el futuro", pero destacó lo conseguido en la instancia parlamentaria mixta: "Tal vez ya no hay una quiebra inminente, pero nada garantiza que en el medio plazo (no) ocurra. Hicimos lo que pudimos, pero se logró un avance".
Sin embargo, algunos parlamentarios oficialistas e independientes reprocharon lo aprobado en la comisión mixta y abrieron la puerta a una posible fuga de votos la Cámara Baja.
"Yo me tragué en la comisión mixta cuestiones que no me gustan por principio, que me generan sensaciones vomitivas, pero que lamentablemente, en función del realismo político y responsabilidad, hay que tragarse. Yo llamo la responsabilidad, porque: ¿cuál es la alternativa en estos momentos?, ¿permitir que la isapres quiebren? Por favor", comentó el diputado Tomás Lagomarsino (independiente-Partido Radical).
El diputado de la bancada socialista Tomás de Rementería relevó que "si la isapres tienen que quebrar, buscaremos la forma de apoyar a sus afiliados, pero no podemos apoyar a los dueños de la isapres, que son los que están buscando ayuda en este caso".
"Yo me pregunto si van a salir a celebrar los afiliados o los ejecutivos, y los dueños de la isapres van a estar en un yate tomando champaña a la hora de que se apruebe este proyecto. Yo no voy a poner mi voto para salvar a la isapres", advirtió el ecologista Félix González.
En la misma línea, el socialista Marcos Ilabaca adelantó: "Yo, en particular, no voy a aceptar una solución de estas características cuando se le mete nuevamente la mano al bolsillo a los ciudadanos".
Respecto a la determinación de votar la ley corta el lunes, el ministro de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), Álvaro Elizalde (PS), dijo que "nosotros insistimos que tenía que aprobarse este texto con celeridad; no obstante, eso no fue posible".
"Como ustedes saben, muchas veces los parlamentarios tienen viajes comprometidos a sus regiones y, por tratarse una votación de quórum (calificado), los comités decidieron citar el día lunes para asegurar el quórum necesario para la aprobación de una normativa tan importante, toda vez que no necesariamente todos van a votar a favor de esta normativa", apuntó.
