El Instituto de Salud Pública (ISP) alertó sobre el uso de un producto cosmético denominado "Mesostabyl", que es promocionado a través de Internet como un producto adelgazante de uso inyectable, cuando su registro sanitario indica que es de uso externo, para masajes reductores.
A través de la Sección Cosméticos del Departamento Agencia Nacional de Medicamentos del ISP, se informó que en el contexto de una investigación profesional, se evidenció la publicidad en internet de este producto como ampollas para inyectarse de forma subcutánea por su propiedad lipolítica, lo que al no estar comprobado puede ser un riesgo para la salud de las personas.
De hecho, en algunos centros de estética el producto es inyectado por un valor de entre 25 mil y 40 mil pesos.
"Este producto sólo se puede usar de forma externa, no como inyectable, por lo tanto, ni siquiera un profesional de la salud y tampoco ninguna persona que se dedique a hacer masajes está autorizado para inyectar un producto cuyo registro es sólo para uso cosmético, como tópico, como ungüento, en forma externa", dijo el director del ISP, Álex Figueroa.
Infecciones, necrosis insuficiencia vascular donde se inyecta, llegando incluso al riesgo de la amputación, son parte de las posibles consecuencias que se han visto en casos en España, que es desde donde procede el producto.
La jefa de la Sección Cosmética del Departamento Agencia Nacional de Medicamentos del ISP, Inés Carreño, explicó también en qué consiste el Mesostabyl y sus eventuales consecuencias.
"El efecto que tiene es efectivamente disolver grasas, pero aplicado de forma externa. Inyectado puede destruir las células y, por lo tanto, es desconocido el efecto que vaya a producir y dependiendo de quien lo pone, a qué profundidad, es el grado de daño que puede producir", indicó.
Usuario relató experiencia
Este producto se aplica correctamente en algunos centros de estética a través de masajes, aunque en otros se ha detectado que se aplica la inyección, pero lo que más preocupa a las autoridades es la autoadministración.
En esa línea, Cristián, de 22 años, compró estas ampollas a través de internet y contactó a un enfermero para que le inyectara cinco de estas ampollas, en las que gastó 40 mil pesos. Si bien no tuvo reacciones adversas, tampoco el prometido efecto de adelgazar.
"El miércoles me iba a inyectar la otra dosis y no desarrollé ningún tipo de efectos adversos, tampoco bajé de peso, en ningún momento fue como una receta milagrosa como lo vendían", indicó.
El producto está aprobado desde 2014 en Chile y la Seremi Metropolitana de Salud llamó a realizar denuncias, tanto a través de su sitio web como el del ISP, en caso de detectar mal uso o venta en Internet que promocione su inyección.