La Encuesta Nacional de Salud 2022, realizada por la Universidad Andrés Bello, reveló que el 74% de las personas afirma que aumentó su gasto en salud en el último año -incluyendo el desembolso en medicamentos-, la cifra más alta en 12 años.
Según detalla el estudio, este índice de percepción de los usuarios respecto al alza en el gasto en salud llegaba a un 47% en el año 2020, y a un 57% en el 2021.
El director del Instituto de Salud Pública de la U. Andrés Bello, Héctor Sánchez, explicó que "este período que tuvimos durante dos años, en que los pacientes crónicos estuvieron subatendidos, generó un agravamiento de la situación de salud y en muchos casos han tenido que recurrir a medicamentos más agresivos, muchos se han tenido que hospitalizar; por lo tanto, la gente ha demandado más tratamientos".
Añadiendo que otro elemento que se suma es que por la pandemia "han aumentado los problemas de salud mental, que requieren tratamientos que, en muchos casos, no están cubiertos por el sistema privado y público".
NOTA ROJA AL SISTEMA DE SALUD
Por otro lado, respecto a la evaluación del sistema de salud, la encuesta señala que hubo una leve alza de una décima, llegando a un 3,9 de nota tanto en pacientes Fonasa como de las isapres, mientras que en 2021 alcanzó el 3,8; en 2020 el 3,7, y en 2019 un 3,8, siendo los peores años el 2015 y el 2016, con nota 3,5 desde que se realiza el estudio en 2010.
En detalle, Fonasa subió en el último año de nota 3,7 a un 4, las isapres bajaron de un 4 a un 3,9.
"Hay dos variables que han influido: la primera es que en 2020 y en 2021 el sistema estuvo prácticamente cerrado para la atención médica no Covid-19 el primer año y en 2021 se empezó a abrir parcialmente. Este año, en cambio, la situación se ha ido normalizando y eso genera una mejor evaluación respecto a los dos años anteriores, pero llega a los niveles prepandémicos", indicó Sánchez.
A esto se suma, según el especialista, que el sistema público y privado "han iniciado muy fuerte la telemedicina, que ha sido excelentemente bien evaluada por los usuarios, en especial los del sector público".
Finalmente, el sondeo evaluó el nivel de preocupación de sufrir una enfermedad catastrófica que no esté contemplada en el Plan Auge y no contar con el financiamiento, llegando a un 62% de los encuestados que expresaron tener este sentimiento, siendo la proporción más alta desde 2013, cuando llegó a un 13%.