Los ministerios de Salud y de Hacienda acordaron ingresar una indicación para aplicar un impuesto a los vaporizadores en un proyecto de ley que se encuentra en el Senado y que busca igualar la regulación que tienen los productos derivados del tabaco a los cigarrillos electrónicos.
Pese a que aún no se han registrado casos en Chile, estos vaporizadores comenzaron a estar en la mira de las autoridades luego que la comunidad científica advirtiera de los riesgos para la salud del uso de este tipo de cigarrillos, incluso aquellos sin nicotina, y porque se les considera un punto de inicio para que los menores de edad empiecen a fumar tabaco.
Según cálculos del Gobierno, de aprobarse esta iniciativa, permitiría recaudar unos 200 millones de dólares anuales.
De acuerdo a lo informado este jueves por El Mercurio, la normativa también restringiría el uso de los vaporizadores en espacios públicos cerrados, impediría su venta cerca de colegios y a menores de edad, establecería que lleven una advertencia sanitaria en su envase y también prohibiría su publicidad y promoción.
Actualmente, la legislación contempla un impuesto de 30 por ciento a las cajetillas de cigarros, el mismo que se aplicaría a los "vapeadores", y del 52,6 por ciento a los cigarrillos sueltos.