Carlos Badilla Núñez sufre de una insuficiencia cardíaca y está conectado a un órgano artificial.
Su madre realizó un llamado para tener un donante para su hijo.
Encabezando la lista nacional de espera para un trasplante de corazón se encuentra un hombre de 39 años, llamado Carlos Alberto Badilla Núñez, quien sufre de una insuficiencia cardíaca agravada por una descompensación.
Badilla se encuentra conectado a un corazón artificial desde el pasado 2 de octubre, para recuperar en alguna medida sus funciones orgánicas mientras llega un donante, una espera que tiene límites, según los médicos de la Clínica Dávila.
Su madre, Mirna Núñez, hizo un llamado a las personas que pudiesen ser donantes a que se sensibilicen, "porque mi hijo es joven, tiene mucho por vivir, es excelente hermano, muy buen hijo".
"Es duro decirlo, pero después de que uno se va de este mundo, ¿de qué le sirve el cuerpo? ¿Por qué no dar más vida a otras personas?", se preguntó la mujer, que aseguró que "no es mucho lo que puede esperar".
De acuerdo al médico de la Clínica Dávila, Juan Pablo Peralta, el corazón artificial al que está conectado "habitualmente se usa durante cuatro a seis semanas. Si en ese plazo no tenemos un donante, habría que cambiar el equipo, lo que significa un riesgo para el paciente", con alto riesgo de infecciones, embolias y hemorragia.
"Hay una serie de circunstancias que hacen que el tiempo que tenemos para trasplantarlo sea limitado" reconoció Peralta.
