El subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara (PPD), afirmó en Cooperativa que el combate a la delincuencia y el crimen organizado es una tarea "urgente" que requiere el apoyo de todos los elementos del Estado, a la vez que se manifestó "optimista" ya que, a su juicio, la "solidez democrática e institucional" de Chile permitirá salir adelante de esta crisis de seguridad.
En entrevista con Lo Que Queda del Día, sostuvo que "la violencia con la que se cometen los delitos ha cambiado en el país", comparando que "cuando nosotros llegamos a gobernar el panorama era muy distinto a lo que me tocó ver cuatro años cuando estuve en el gobierno anterior (Bachelet II)".
Sin embargo, enfatizó, "estoy absolutamente convencido de que no tenemos tiempo ni margen para culpar a gobiernos anteriores ni otras instituciones, porque lo que enfrentamos es de una magnitud tan grande que requiere que nos pongamos a trabajar".
En ese marco, Vergara instó que "hay que dejar (de lado) ciertos tabúes ideológicos y trabas para mirar las cosas: cuando observamos y definimos que la estrategia público-privada, esta fuerza de tarea, no solo tiene que ir sobre el control (policial) sino también sobre el mercado secundario, sobre todo reconocer que hay crimen organizado".
"Como país debemos ser muy claros y no titubear en reconocer de qué estamos hablando", subrayó, recordando que, "un ejemplo, costó mucho reconocer que en muchos casos el comercio ambulante también estaba tomado por el crimen organizado, y fue un error por mucho tiempo tratar de decir que era un fenómeno aislado".
Sobre los efectos de las disposiciones que ha adoptado el Ejecutivo, comentó que "aunque veamos un quiebre en el alza (de delitos), mientras existan víctimas fatales no hay celebración alguna; lo que sí, (lo primero) confirma que hay ciertas medidas que están dando resultados y hay que perseverar y seguir por esa línea".
Asimismo, en el plano general del país, "veo un Estado con instituciones robustas, veo instituciones que funcionan, veo que la capacidad institucional para sostener este gran desafío y encontrar una salida rápida y real existe", manifestó: "Soy más optimista (respecto) de otras visiones".
Enfatizó que "la solidez democrática e institucional que tenemos como país nos permite y nos va a permitir avanzar y salir de este momento país que estamos viviendo", señalando, entre otras medidas, que hay que seguir "trabajando con las policías, en el proceso de reforma, con las instituciones como el Ministerio Público y otras", y recalcando que "lo que tenemos que hacer es aumentar el sentido de urgencia, pero por sobre todo la convicción y la determinación a tomar decisiones".
"Por ejemplo, las que se han tomado en espacios públicos, en el barrio Meiggs, la Plaza de Maipú y otras plazas", resaltó, sentenciando, no obstante, que "esto requiere un esfuerzo mayor que sobrepasa lo público, lo privado y al Gobierno: es una labor de Estado".
REFORMA A CARABINEROS: DEBE TENER "LEGITIMIDAD Y CREDIBILIDAD"
El subsecretario también se refirió a la Unidad Consultiva para la reforma a las policías, que tuvo su primera sesión este viernes. "Es parte de un proceso tremendamente necesario para el país, la democracia y que es de continuidad desde el Gobierno anterior", dijo.
Detalló que actualmente se trabaja en tres espacios para llevar adelante aquella reforma: "El Consejo Asesor, que es de Estado, donde están el Ministerio Público, las policías, el Ministerio de Justicia, el del Interior; la Unidad Consultiva y la Secretaría Ejecutiva, que me toca encabezar y son los equipos técnicos de Gobierno".
Vergara puso el foco en Carabineros, "que es la policía más grande, que tiene un rol preventivo y de control, pero en muchos casos es también la única cara visible del Estado", marco en el cual "gran parte de los que vemos hoy, aparejado al crimen organizado, tiene que ver con la ausencia del Estado". Y, opinó, "eso no se corrige solamente con más carabineros", aunque "sin duda es un elemento central".
Por ello, dentro de los objetivos que persigue la futura reforma, relevó que "el paraguas más grande de todo esto tiene que ver con (que exista) una policía que cuente con legitimidad y credibilidad: hemos visto en los últimos meses que la evaluación a Carabineros nuevamente está volviendo a aumentar, pero sin dudas hay una serie de tareas pendientes para abordar".
Igualmente "nos interesa su capacidad y eficacia para estar donde más se le necesita (...) hoy tenemos disparidades y desigualdades muy grandes, pero también hay un elemento no menor que tiene que ver con la transparencia: muchos alcaldes y alcaldesas dicen que no saben cuántos carabineros tienen", continuó.
Considerando aquellos puntos, la misión en "parte de este proceso es aumentar la eficacia, la transparencia, mejorar muchos elementos administrativos, también nos importa mucho el bienestar de los funcionarios policiales y, además, que es de mucha importancia, el despliegue operacional, particularmente de orden público, que por supuesto siempre se enmarque en un respeto irrestricto de los derechos humanos".
En lo inmediato, el subsecretario resaltó que "hace unas semanas logramos ingresar las indicaciones para la creación del Ministerio de Seguridad, y ahí hay con mucha claridad un elemento que va a permitir la subordinación del poder civil sobre las policías"; y en tanto, en las próximas semanas se implementará la "segunda etapa de redistribución de policías: por primera vez estamos incluyendo factores que van más allá de lo que se considera hoy, estamos dando un paso a criterios de igualdad, de recursos municipales".
