La mañana de este viernes una rotura de una matriz de agua potable de la empresa Esval en Putaendo provocó un corte de agua que afectó a cerca de 2.400 personas, especialmente en la población San Antonio.
En el lugar trabajó personal de la sanitaria para reponer el servicio y se dispuso de estanques y camiones aljibe para suministrar del elemento a los habitantes de la comuna, quienes denunciaron que es la tercera vez en esta semana que se rompe la misma matriz.
Debido a esto, la gobernadora de San Felipe, Patricia Boffa, señaló que "la gente está molesta de que no tengan el vital elemento así que está en todo su derecho de poder exponer estos antecedentes en la Superintendencia de las sanitarias".
En tanto, en Quillota se registró una situación similar con la quinta rotura de una matriz durante una semana, perjudicando la mañana de este viernes a unas 6.000 personas.
Gastón Placencio, de Esval Quillota, explicó que los motivos del corte se debieron a que "todos los años ejecutamos una cantidad cercana al kilómetro de tuberías de renovación en distintos puntos".
La empresa dispuso de estanques y camiones aljibes para suministrar agua a los habitantes de Putaendo, así como también a los de Quillota, quienes denuncian hace semanas que las matrices explotan, complicando a las personas, más aún con las altas temperaturas que se han registrado en la zona.