Esval presentó este miércoles un plan de obras con el que busca garantizar el suministro de la ciudadanía mientras se registran episodios de alta turbiedad en las fuentes de agua de la Región de Valparaíso.
Con estas obras en Los Andes y San Juan, la sanitaria podrá entregar un día extra de suministro antes de cortar agua, lo que evitará situaciones como las que se registraron en febrero producto de las intensas lluvias en las zonas cordilleranas.
El subgerente zonal de Esval, Hernán Berríos, explicó que "las obras en Los Andes tienen que ver con estanques de acumulación que permita contar con agua cruda para poder solventar un día de consumo de 12 horas para que se pueda enfrentar una alta turbiedad en las redes".
Berríos destacó que la turbiedad del río Aconcagua alcanzó niveles de 113 mil NTU en la bocatoma de la planta de Concón mientras que su capacidad de procesamiento es 3 mil.
"O sea superó en 40 veces la capacidad de producción, por lo tanto hubo que detener la planta y ,con las inversiones que hemos realizado en función de poder contar con mayor fuentes subterráneas, pudimos compensar el suministro", añadió el ejecutivo.
Las obras tienen un costo aproximado de 900 millones de pesos en Los Andes y 2.500 millones pesos en San Juan y se espera que estén listas el 2018.
En paralelo, los organismos del Estado continúan adelante con las investigaciones contra Esval para determinar su responsibilidad en los últimos cortes de suministro.