La empresa eléctrica deberá pagar más de 800 millones de pesos.
El monto corresponde a un 1 por ciento de las utilidades de ENEL.
La SEC ya había cursado una multa a la empresa en 2017.
La Corte Suprema ordenó a la compañía ENEL a pagar una multa de más de 850 millones de pesos por "los bajos estándares" en la calidad del suministro.
El máximo tribunal ordenó, de manera unánime, a la empresa pagar una multa de 17.776 UTM, la que fue solicitada por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) luego de que en 2017 ENEL incurriera en más interrupciones de servicio por alimentador que aquellas que admite la ley.
El fallo determinó que "el reproche actual debe ser más intenso debido a que existió uno anterior que claramente no tuvo la aptitud suficiente para inhibir la realización de la conducta reprochada".
La Suprema además destacó que el actuar de Enel "evidentemente genera perjuicio a todas aquellas personas que se vieron privadas del mismo por un tiempo mayor al permitido por la normativa vigente".
Bajo estos argumentos, el fallo determinó la elevada multa porque "desde la perspectiva del beneficio económico obtenido con la infracción, se deben considerar los gastos que la empresa se ahorra al no invertir recursos suficientes para ajustar sus instalaciones a los estándares de calidad que deben proporcionar".
La Corte Suprema añadió que la empresa ya había sido sancionada con anterioridad y, destaca, que la multa equivale al 1 por ciento de las utilidades anuales de ENEL.
Al respecto el superintendente de la SEC, Luis Ávila, explicó a Emol que "lo que está detrás de esto es un proceso anual en que se califica el desempeño de la empresa en términos de las interrupciones eléctricas que llegan a sus clientes, y lo que esperamos es que con este fallo se dé una muy clara señal hacia la empresa de que debe corregir el desempeño y entregar permanentemente un suministro eléctrico continuo y seguro a sus clientes".
"Las sanciones, y en este caso la ratificación de la Corte Suprema de una sanción, es una señal muy nítida entendida como una búsqueda de cambio de conducta de la empresa porque ha infringido la norma", manifestó.
"Siempre hemos tenido el convencimiento de que nuestro actuar ha sido con estricto apego a la legalidad vigente y eso ha sido absolutamente ratificado en la reciente sentencia de la Corte Suprema", sostuvo Ávila.
