Jacqueline van Rysselberghe, intendenta del Biobío, acusó al jefe de gabinete del municipio de Lota, Vasili Carrillo, de ser el articulador político detrás de la toma del Chiflón del Diablo por parte de 33 mujeres.
"A ellas les gustaría sinceramente que se mantuvieran eternamente los puestos de emergencia creados por el Cuerpo Militar del Trabajo, pero detrás de ellas se fomenta esta situación por actores políticos, es bien raro que intentaran tomarse la Catedral acompañadas por Vasili Carrillo, jefe de gabinete del alcalde de Lota y presidente regional del MAS", expresó a El Diario de Cooperativa
"Es bien raro que hayan llegado a tomarse la mina con este mismo personaje (...) Detrás de ella hay actores políticos que les gustaría que la región estuviera conflictuada, incendiada y no se avanzara nada", agregó.
Además, desestimó las evaluaciones médicas hechas a las "33 de Lota", en donde se consignaban problemas de salud importantes para las protagonistas.
"Hicimos una evaluación por parte del Servicio de Salud y si bien hay mujeres que tienen enfermedades crónicas, están todas compensadas y bien compuestas", precisó.
Van Rysselberghe recalcó que "no se puede pretender que en una situación en que el Gobierno entregó un número importante de empleos y la gente que lo tomó sabía desde un comienzo que tenían un principio y un fin, pretendan que se mantengan eternamente".
"No tengo ningún problema en recibirlas, lo que pasa cuando se meten actores políticos que quieren generar conflicto eso me complica, pero yo a ellas recibo encantadísimas", sentenció.