La temperatura promedio de la época estival fue de 29 grados, sin registrarse olas de calor en Santiago.
El meteorólogo José Vicencio aseguró que es un fenómeno normal y que se debió, principalmente, al fenómeno de La Niña.
Además, gracias a las lluvias de finales de enero, la región tiene un superávit de precipitaciones.
La Dirección Metereológica de Chile (DMC) reveló que este verano fue el menos caluroso de la última década en la Región Metropolitana, donde las temperaturas máximas promediaron los 29 grados.
De acuerdo a los registros entre el 1 de diciembre y el 20 de febrero pasado, la temperatura promedio en Santiago fue de 29,4 grados, en comparación a los 31,4 grados que se promediaron en el verano del 2020, y de 30,4 durante el 2019, según consignó El Mercurio.
Esto va de la mano con que no se registraron olas de calor en la capital, en comparación al año anterior, cuando se reportaron cinco de estos fenómenos.
El meteorólogo de la Oficina de Servicios Climáticos de la DMC, José Vicencio, aseguró al matutino que estas variaciones son normales y que estarían directamente relacionadas al fenómeno de La Niña, que "tiende a producir un enfriamiento de la zona costera del centro y norte de Chile", lo que se vio reflejado -también- en la baja de incendio forestales debido a la nubosidad y humedad.
En tanto, a nivel nacional, la temperatura máxima durante este verano promedió los 23 grados y se registraron hasta cinco olas de calor en el sur del país debido, al igual que en Santiago, al fenómeno de La Niña, asociado a las altas presiones que llegan hacia esta zona del país.
"Las temperaturas más altas de este verano no se registraron ni acá en Santiago ni en el norte; se registraron en la zona sur, por ejemplo, con los 37°C de Valdivia", detalló el especialista.
Respecto al agua caída en la Región Metropolitana, tras las intensas lluvias registradas a finales de enero y que provocaron aluviones en sectores como el Cajón del Maipo, se superaron los valores normales de esta época, con 40 milímetros de agua caída, lo que generalmente es de 4,3.
"Tenemos un 900 por ciento de superávit de lluvia, como inicio de período lluvioso, por así decirlo, lo cual es harto", sin embargo, se adelantó y señaló que el otoño, que acaba de comenzar, "no debiese ser tan lluvioso. Estamos esperando que, en general, sea un otoño más bien seco nuevamente, muy similar a lo que ha ocurrido en otros años", comentó Vicencio.
