Según informó el INE, hace 10 años llegaba a 48% y en el presente alcanza apenas al 52%.
En 2018, el 40% de las mujeres no tuvo ingresos propios, mientras la brecha salarial puso a las que sí lo tuvieron 27% por debajo de los hombres.
Por razones, en parte, culturales, actividades como el cuidado de familiares sigue recayendo mayoritariamente en las mujeres.
Ad portas del Día Internacional de la Mujer, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) dio a conocer un estudio sobre la brecha económica entre hombres y mujeres en relación con los ingresos, autonomía y participación en el mercado laboral.
Según la Encuesta Suplementaria de Ingresos realizada por el INE en 2018, las mujeres recibieron un 27 por ciento menos que los hombres -475 mil pesos versus 652 mil, respectivamente-. La brecha disminuyó levemente respecto a 2017, cuando fue de 29,3 puntos porcentuales.
Independientemente de la edad o el nivel de estudio, la brecha económica se hace presente. El grupo de personas que se encuentran entre los 30 y 54 años es el que la muestra más evidente debido a que, en igualdad de condiciones, las mujeres obtuvieron un 32,2 por ciento menos que los hombres en ingresos.
Esta brecha se hace más evidente al constatar la autonomía económica entre ambos sexos. En 2018, el 40 por ciento de las mujeres de 15 años o más no obtuvo ingresos propios, lo que las hacía dependientes de terceros. En el caso de los hombres, esta cifra es sólo de un 15 por ciento.
Según la Encuesta Nacional de Empleo del INE, en el último trimestre de 2019 se estimaron casi seis millones de personas que no están clasificadas ni como ocupadas ni desocupadas. De éstas, el 65 por ciento (casi 3,5 millones) eran mujeres que, según el estudio, debían cuidar a un familiar.
Sin embargo, en los últimos años las mujeres se han estado incorporando crecientemente al mercado laboral. En el último trimestre del 2010, la participación en el mercado era de un 48 por ciento, mientras que en el mismo período de 2019 esta cifra aumentó a un 52 por ciento.
