"Es una semana negativa para el Ejecutivo, se reaccionó tarde", lamentó Mario Desbordes.
La CUT convocó a una marcha para el 21 de agosto.
Los cuestionamientos son a nivel político y comunicacional.
Tras el anuncio por parte del gobierno de un proyecto que compite con el presentado por Camila Vallejo (PC) sobre la reducción de la jornada laboral, parlamentarios de Chile Vamos han cuestionado la respuesta del Ejecutivo y el manejo político de la situación.
El diputado de Evópoli, Luciano Cruz-Coke, sostuvo que "el gobierno comete un error en plegarse a ese proyecto sin enfatizar, porque hay una encuesta de la UDD que señala que un 70 por ciento apoya al proyecto del gobierno".
"Ha estado mal manejado políticamente, mal manejado comunicacionalmente y espero que hagamos el énfasis donde tiene que estar, debe estar puesto en la flexibilidad y en darle libertad a los trabajadores, y en ese sentido el proyecto del gobierno es mucho mejor que el proyecto del Partido Comunista. Creo que el error del gobierno ha sido ponerlos en la misma categoría", sostuvo.
Por su parte, Mario Desbordes (RN) comentó que los cuestionamientos de diputados como Gonzalo Fuenzalida, Manuel José Ossandón y Francesca Muñoz fueron "antes del anuncio del Ejecutivo del día de ayer y yo supongo que a partir de este anuncio todos los parlamentarios de Chile Vamos vamos a apoyar la propuesta y los anuncios y las indicaciones que se plantearon".
"El lunes le pedimos en el comité político al Ejecutivo que pusiera urgencia a nuestro proyecto, que destacara sus virtudes y nos demoramos hasta el jueves. Evidentemente las cosas no están andando a la velocidad que las circunstancias ameritan y por lo tanto en términos comunicacionales es una semana negativa para el Ejecutivo, se reaccionó tarde y eso se lo plantearemos el lunes al Ejecutivo en el comité político", lamentó.
CUT llamó a marchar
Mientras tanto, desde la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) realizaron un llamado a marchar en contra del proyecto del gobierno el próximo miércoles 21 de agosto.
Bárbara Figueroa, presidenta de la CUT, planteó que "lo más grave del proyecto que plantea el gobierno tiene que ver con este esfuerzo, con generar condiciones de negociación individuales, a sabiendas de que ninguno de nosotros a nivel individual estamos en igualdad de condiciones con un empleador que da o quita empleo".
"Ya actualmente se cuenta con la posibilidad, en el actual Código del Trabajo, de poder acordar y pactar la jornada, por lo tanto no existe esta supuesta rigidez", precisó.
