Este domingo se celebró el Día del Trabajador Inmigrante, instancia en la cual la ministra del Trabajo, Ximena Rincón (DC), hizo un llamado para fortalecer los derechos laborales y defendió la "esencia" de la reforma laboral que se tramita actualmente en el Senado.
"En la esencia vamos a defender lo que ha salido en la Cámara de Diputados, lo que no significa que no haya perfeccionamiento que nos permita avanzar. Necesitamos relaciones laborales modernas que nos permitan que más hombres y mujeres tengan negociación colectiva y que los beneficios de ella se entiendan", dijo.
Consultada por los dichos del senador Andrés Allamand (RN) respecto de que no habría "incentivo político" para que la derecha llegue a un acuerdo con el Gobierno en esta iniciativa, la ministra dijo haber visto "muy motivado" al parlamentario en la Comisión", y señaló que espera "que siga con el mismo ímpetu y energía".
"Veo a unos senadores y senadores absolutamente metidos en la discusión del proyecto. Creo que eso es lo que necesitamos, mandar señales positivas al país. Las señales negativas y descalificadoras no nos permiten generar confianza y avanzar", sentenció la secretaria de Estado.
El 5 de agosto se vota en general el proyecto de reforma laboral en la Comisión de Trabajo del Senado, donde el Gobierno espera que se apruebe para que pase a su discusión en la Sala.
"Homologar derechos"
Éste es el tercer año consecutivo en que se celebra en Chile el Día del Trabajador Inmigrante, ocasión aprovechada por el Sindicato Unitario de Trabajadoras y Trabajadores de Casa Particular (SINTRACAP) para abogar por mayores derechos laborales hacia los trabajadores extranjeros.
Su presidenta, Emilia Solís, señaló que están en conversaciones con la Cancillería y la Oficina de Inmigraciones para resolver algunos asuntos: "Se está tomando conciencia de que tenemos gente que está con problemas, porque ellos tienen que estar dos años con un empleador para cambiar de trabajo y tener los papeles, y resulta que antes de los dos años, cuando tienen problemas, se cambian, les cobran tremendas multas", explicó.
Jacob Sandoval, director nacional de Instituto de Seguridad Laboral (dependiente de la Dirección del Trabajo), señaló que "el Gobierno de la Presidenta Bachelet se ha planteado como gran desafío terminar con las desiguales en Chile, no sólo para los chilenos sino que para el conjunto para quienes aportan para el desarrollo del país".
"En ese sentido, el poder homologar derechos de trabajadores inmigrantes a los derechos de lo trabajadores chilenos es un tema muy importante", apuntó.
A la cita también asistió el cónsul boliviano en Santiago, Jorge Ocsa, quien señaló como "necesario fortalecer la organización, pero también la calidad de trabajo".
