Monckeberg: Ni Mandrake el Mago convencería al PC y FA de la flexibilidad laboral

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Autor: Cooperativa.cl

El ministro del Trabajo apostó en Cooperativa por la "amplia mayoría moderada" del Congreso para sacar adelante el proyecto de "modernización".

Dijo que éste reduce la semana a 41 horas, en promedio, pero sin afectar los salarios, como sí hace el proyecto de "40 horas de Camila Vallejo.

Monckeberg: Ni Mandrake el Mago convencería al PC y FA de la flexibilidad laboral

"No se cambian los límites, no se precariza, no se explota a nadie", dijo el ministro.

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El ministro del Trabajo y Previsión Social, Nicolás Monckeberg (RN), defendió en Cooperativa el proyecto del Gobierno que busca flexibilizar la jornada laboral, y sostuvo que confía en tener los votos de los sectores "moderados" del Congreso para su aprobación.

"Lo que nosotros estamos planteando es que reducir la jornada no puede ser a costa del sueldo del trabajador, y si usted reduce la jornada y la mantiene rígida, como lo dice el Partido Comunista (...) y no da ningún tipo de flexibilidad, tarde o temprano eso va a redundar en menor sueldo para el trabajador", dijo Monckeberg en diálogo con Lo que Queda del Día, y en alusión al proyecto de "40 horas" de Camila Vallejo.

"Los parlamentarios del Partido Comunista dicen: 'Quiero reducir la jornada, como la tienen todos los países europeos', pero se oponen al teletrabajo, se oponen a la flexibilidad laboral, se oponen a que un trabajador pueda pactar un rango de horas para ingresar o salir de la pega", criticó.

Al ser consultado sobre los avance en el Congreso, Monckeberg aseveró: "Creo que tenemos los votos (...) es un mejor proyecto, que protege la remuneración de los trabajadores. (Sin embargo) yo creo que ni Mandrake el Mago lograría convencer al Partido Comunista y al Frente Amplio de aprobar un proyecto de flexibilidad laboral".

No obstante, "hay una amplia mayoría moderada en el Congreso que quiere mejorar la calidad de vida del trabajador", apuntó.

Entre las propuestas del Ejecutivo se encuentra la "reducción de jornada a 41 horas promedio semanal, pero acompañada de flexibilidad y adaptabilidad laboral, para que no caiga la remuneración del trabajador, para que la productividad sea la forma de trabajar menos".

"Aquí no se cambian los límites, no se precariza, no se explota a nadie", insistió el ministro.

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