Tras la confirmación del Gobierno del veto que aplicará sobre algunos aspectos de la reforma laboral en respuesta al fallo del Tribunal Constitucional que declaró inconstitucional la titularidad sindical, el presidente de la UDI, Hernán Larraín, acusó al Ejecutivo de "irresponsable".
"Nos preocupa un Gobierno que cada día actúa más irresponsable y, sobre todo, más poco transparente. Todavía no se conoce el contenido del veto y se habla de una ley complementaria, cuyos contenidos no se conocen", afirmó el senador.
"Este es un Gobierno que está retrocediendo a la época de las cavernas, a la época de la oscuridad y no solamente en esta materia, sino en otras materias, por ejemplo en la entrega de los resultados educacionales también está actuando de forma poco transparente", continuó.
"Nosotros queremos protestar por esta forma irresponsable y oscura del Gobierno para tratar un tema tan importante como es el de la reforma laboral", aseveró.
"Los vetos no se pueden discutir, solamente se aprueban o rechazan y es una estrategia para hacer un cambio en los contenidos de la reforma laboral y se aprovecha el veto en lugar de una ley que se pueda discutir y consensuar", concluyó el parlamentario.
En tanto, el integrante de la Comisión de Trabajo de la Cámara, Patricio Melero, acusó ánimo revanchista del Gobierno.
"Nuevamente retrocedemos y más que un ánimo de generar adaptabilidad y flexibilidad en las relaciones laborales, hay ánimo de revancha frente a un Tribunal Constitucional que puso las cosas en su lugar", indicó.
"Vemos con buenos ojos esta primera señal"
Por su parte, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, valoró la acción del Gobierno, calificándolo de una buena primera señal.
"Hoy se ha hecho una objeción, un veto, no a todo el capítulo de pactos, que era lo que nosotros esperábamos. También se ha vetado el tema del quorum. Nosotros hubiésemos esperado además que se hubiese vetado servicios mínimos y también la materia de descuelgue, sin embargo, vemos con buenos ojos esta primera señal".
"Ahora, se ha hablado de que esto va a ir acompañado de una ley corta, pero creo que era a todas luces imprescindible que el Gobierno efectivamente operase con la materia de veto", añadió la dirigenta.
"Creo que fue un veto demasiado moderado eso sí, me parece que fue muy temeroso y creo que en eso mucho peso tuvieron las opiniones de algunos ministros", concluyó.
En tanto, el diputado comunista Lautaro Carmona, integrante de la comisión de Trabajo, sostuvo que "yo pienso que ha sido tan exagerado el cuestionamiento de la derecha y tan a ultranza la defensa de los empresarios, que espero triunfe en la mayoría de los parlamentarios, como un veto requiere un sí o un no, una mirada más civilizada del mundo que estamos viviendo y podamos aprobar sin dificultad el veto y también la ley corta".