El General Director de Carabineros, Gustavo González, recordó a sus funcionarios que tienen atribuciones para determinar si un conductor está bajo la influencia del alcohol en base a un examen de tipo visual y su propia experiencia, un aviso particular frente a la reciente polémica que ha surgido en torno a la confiabilidad del alcotest.
Según La Segunda, González recomendó, a través de una videoconferencia, como principal herramienta para determinar el estado etílico de una persona la "experiencia del uniformado y la comprobación física (rostro enrojecido, inestabilidad al caminar, hálito alcohólico) de la persona controlada". Revisión que será apoyada con el alcotest.
El vespertino añadió que el general hizo especial hincapié en que los resultados del alcotest no deben ser entregados a la prensa.
"Basta con la declaración policial"
Además, el Fiscal Nacional subrogante, Alberto Ayala, solicitó un informe técnico sobre el uso de estos cuestionados dispositivos a la directora del Senda, Francisca Florenzano. Un documento que deberá incluir además cómo se calibran las máquinas y eventuales márgenes de error.
"Hay que tener claro que sí bien existen instrumentos para el control de la conducción bajo los efectos del alcohol y en estado de ebriedad (el alcotest y la alcoholemia), la ley es tajante: Si bien son herramientas con plena validez legal, no se requiere ninguna de ellas para obtener una sentencia condenatoria y la suspensión de la licencia de conducir, ya que basta con la declaración policial. Los exámenes otorgan un mayor respaldo y certeza", dijo Ayala a La Segunda.