El Ministerio del Transportes anunció modificaciones a la actual Ley de Tránsito.
Éstas irán enfocadas en "mejorar la convivencia vial".
La reducción de la velocidad busca disminuir las muertes en accidentes de tránsito.
El ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo, anunció el envío al Congreso de una moción que busca modificar la actual Ley de Tránsito "en favor de la convivencia vial".
Entre las propuestas de la cartera se encuentran establecer en las escuelas de conducción la temática de convivencia vial, definir deberes y derechos para los ciclistas, como también promover estándares homogéneos para las ciclovías.
Sin embargo, uno de los mayores impactos que tendrá esta modificación será la reducción de la velocidad máxima de 60 a 50 kilómetros por hora. El Gobierno explica que esta medida busca reducir hasta en un 20 por ciento los riesgos de morir en un accidente de tránsito.
"Cuando se aumentó la velocidad (en 2003) hubo un aumento de 25 por ciento de fallecidos en accidentes causados por exceso de velocidad en zonas urbanas. Por lo tanto nosotros estamos convencidos que esta reducción en velocidad máxima es un esfuerzo para salvar vidas", indicó Andrés Gómez-Lobo.
"Quisiéramos revertir eso (las muertes en accidentes). Naturalmente es muy difícil predecir cuál va a ser el efecto, pero sí tenemos el contrafactual que ocurrió el 2003 con respecto al 2002, que fue aumento del 25 por ciento", dijo el ministro, quien apuntó además a que "casi el 45 por ciento de los fallecidos en accidentes de tránsito en nuestro país son peatones o ciclistas".
Por su parte, el subsecretario Cristián Bowen recalcó que se busca "emparejar y marcar la cancha, decir cuales son los derechos y responsabilidades de cada uno de los modos de transporte, de tal manera de que vayamos avanzando hacia una mejor convivencia en nuestras ciudades".
Caroline Moren, representante de la Asociación Vive la Bici, manifestó que "nosotros solicitamos siempre que fuera una velocidad menor porque esto es volver a la velocidad que existía en los 90. Hay ciertos puntos de la Ley de Tránsito en que no todos vamos a estar de acuerdo, como el uso obligatorio del casco".
El proyecto busca, además, establecer una distancia mínima de alentamientos de 1,5 metros y también dos líneas de detención situando a motociclistas y bicicletas delante de los automóviles.
