La ministra de Transportes, Gloria Hutt, desestimó que se pueda evaluar la disminución de las tarifas del transporte público en medio de las manifestaciones en el Metro de Santiago con evasiones masivas que se han extendido durante toda la semana.
Desde La Moneda, la secretaria de Estado además planteó que aún se analiza la aplicación de la Ley de Seguridad del Estado por los incidentes en el tren capitalino, como lo manifestó el Presidente Sebastián Piñera.
"La invocación de la ley de Seguridad del Estado está en discusión y respecto a las tarifas, hay una decisión que ya está establecida. No es una discusión que tenga que surgir del nivel de violencia que hemos visto", dijo la ministra.
Además, Hutt respondió al ex ministro de Transportes Andrés Gómez-Lobo, quien relacionó el alza en la tarifa con la licitación del Transantiago declarada desierta en marzo del año pasado.
"Declarar desierta la licitación no tiene relación alguna con el alza de tarifas actual", enfatizó.
La titular de Transportes además sostuvo que "los que protestan no llegan a ser ni el 0,1 por ciento de los tres millones de pasajeros que el Metro traslada a diario, no es la manera de manifestarse, la violencia es inaceptable.
Frente Amplio llamó a revertir alzas
En tanto, desde el Frente Amplio pidieron al Gobierno un cambio de actitud ante este conflicto.
"La principal responsabilidad está del lado del Gobierno, que en vez de llegar a un diálogo, en vez de entender el problema de fondo, enviar fuerzas de choque en vez de abordar el problema de fondo. Llamamos al Gobierno a escuchar a las personas y a revertir esta alza", dijo el diputado Giorgio Jackson (RD) quien pidió que prime "el diálogo y no la violencia que el Gobierno está promoviendo en las estaciones de Metro".
En cuanto a la dinámica de las manifestaciones, el sicólogo social y docente de la UC Jorge Manzi dijo que la postura de las autoridades puede ayudar a canalizar o a intensificar el conflicto.
"Una parte de lo que origina las protestas es un descontento con las autoridades, no con el Gobierno de turno, porque aquí es una molestia con el sistema político y en ese sentido la forma en que la autoridad maneja el conflicto puede ayudarlo a canalizarlo pero también puede intensificarlo", manifestó.
"Aun cuando lo que ocurrió ayer son acciones que están fuera del marco de la ley, pero etiquetar el movimiento como una acción de delincuentes no necesariamente contribuye que eso se canalice de la una manera como esperamos todos", añadió.
En tanto, el presidente de Metro Louis de Grange cifró los daños en las estaciones en alrededor de 400 a 500 millones de pesos.