El ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo, aseguró en El Diario de Cooperativa que "no podemos hacer tratos especiales" ante el complejo panorama financiero que enfrentan Alsacia y Subus, dos de las principales empresas del Transantiago y que concentran el 41 por ciento del sistema.
El secretario de Estado sostuvo que "no podemos hacer tratos especiales para algunos operadores, menos aún cuando tienen bajos índices de cumplimiento, parte de los problemas de las empresas en que nosotros les descontamos fuertemente por no cumplir los planes operacionales".
"Por lo tanto, no podríamos dejar de cursar esos descuentos como una especie de salvataje financiero para ella", indicó.
Aclaró que "estamos garantizando la continuidad operativa de los servicios. Este es un problema entre los operadores y sus financistas, sus acreedores, es un tema entre privados".
Eso sí, sostuvo que "si vemos que hay algún riesgo en la continuidad operativa de los servicios, vamos a tomar medidas drásticas al respecto (...) contamos con las herramientas en caso de haber algún riesgo a la operación de tomar medidas más firmes, como nombrar un administrador provisional".
Gómez-Lobo, además, explicó que "en el caso de Subus, ellos se acogieron a una figura que se llama 'reorganización'. Por lo tanto, yo quisiera transmitir calma de que esta no es una quiebra".
La colombiana Alsacia, operadora del 25 por ciento del sistema, renegoció en 2014 una deuda con bancos norteamericanos, teniendo que pagar cada seis meses una cuota por 22 millones de dólares. Aquello no se hizo esta semana y se teme que tenga que recurrir a la Ley de Quiebras.
Mientras que la también empresa colombiana, Subus, operadora del 16 por ciento del sistema, ya lo hizo tras presentar deudas con sus acreedores por 180 millones de dólares.
Trabajadores confirmaron paralización
Por su parte, el vocero de los trabajadores de Alsacia, Rodolfo Cid, confirmó que a raíz de esta situación realizarán un paro el próximo martes 28 de junio junto a otros sindicatos del sector.
La movilización sería hasta las 10:00 horas, afectando la denominada hora punta.
"Va a ser una paralización parcial hasta las 10:00 horas y vamos a evaluar si es necesario seguir todo el día, lo vamos a hacerlo. Por de pronto, ya hay autoridades que están tratando de conversar con nosotros, que curiosamente ahora quieren hablar con nosotros", aseveró.
Cid sostuvo que "obviamente nos preocupa la quiebra de Subus, el eventual no pago de bonos de Alsacia que ya está confirmado a Estados Unidos y lo que provoca con eso es una inestabilidad laboral".
Mientras que el vocero de los funcionarios de Subus, Boris Guerrero, indicó que hay incertidumbre, luego que el Décimo Sexto Juzgado Civil de Santiago diera inicio a un proceso de reorganización de la compañía y aseguran que hoy no saben quién es su empleador.
"Estamos súper preocupados. El escenario para nosotros es súper complejo porque vemos que por un tecnicismo legal, Subus puede perder la concesión y entraría a operar este administrador provisional, y es ahí donde la preocupación que tenemos los trabajadores en el sentido de que no se nos va a respetar el derecho legítimo que tenemos de acceder a nuestras indemnizaciones", expresó.
Dio cuenta que "se nos interrumpe todo un proceso de condiciones laborales que nosotros hemos logrado, a diferencia de otras empresas".
"Situación no es sostenible en el largo plazo"
Respecto a si está en riesgo el sistema de caer en un colapso, el doctor en transportes de la Universidad Diego Portales, Louis de Grange, explicó que "esta situación no es sostenible en el largo plazo".
"Es resultado consecuencia de que los costos son mucho mayores de los que tienen las empresas. Por lo tanto, si eso no se arregla, tarde o temprano se va a traspasar a la calidad de servicio que están prestando los buses", aseveró.
De Grange añadió que "en este momento, en el corto plazo, ahí no veo riesgo de que las empresas dejen de operar, pero las autoridades de Transporte tienen que hacerse cargo de esta realidad".