El plazo para llegar a un acuerdo con los acreedores vence el 2 de agosto.
El director del Transporte Público Metropolitano, Guillermo Muñoz, destacó los avances en las conversaciones.
Los usuarios de Subus se concentran en la zona norte y sur de la capital, en comunas como Lo Espejo, El Bosque, La Pintana, Huechuraba y San Bernardo.
En el caso de que prospere la liquidación de la empresa Subus por sus deudas impagas, 780 mil pasajeros del Transantiago se verían afectados por la falta de esta empresa.
Como indicó El Mercurio, el 2 de agosto termina el plazo contemplado en la Ley de Insolvencia y Reorganización a la que se acogió la empresa debido a las deudas impagas por 180 millones de dólares que mantiene.
"Si el Gobierno sigue diciendo que no va a solucionar nada en el proceso de revisión excepcional, probablemente con los bancos nos va a ir mal en la reorganización judicial, y hay que irse a una liquidación y a una quiebra", sostuvo el gerente general de Subus, Andrés Ocampo, ante la Comisión de Transportes de la Cámara Baja.
Debido a que esta empresa controla el 20 por ciento del sistema, Ocampo anticipó que habrá graves trastornos para los 780 mil usuarios que movilizan a diario en sus 1.300 buses, luego que los 6.200 funcionarios descartaran trabajar con otra administración.
"Hemos recurrido a los ministerios de Transportes y del Trabajo y nadie nos da respuestas. Si la empresa quiebra, vamos a perder años de servicio y beneficios que ganamos. Ahora vamos a radicalizar la medida, porque estamos en una situación desesperada", planteó el presidente del Sindicato de Trabajadores de Subus, Boris Guerrero.
Los usuarios de Subus se concentran en la zona norte y sur de la capital, en comunas como Lo Espejo, El Bosque, La Pintana, Huechuraba y San Bernardo.
Transportes descarta cierre
El director de Transporte Público Metropolitano, Guillermo Muñoz, recalcó que la negociación entre Subus, los acreedores y el veedor está avanzando y descartó un posible cierre.
"Hay más acercamiento que al inicio y la información que tenemos es que se van a allanar las partes a llegar a un acuerdo. No creemos que vaya a pasar", recalcó.
"Hemos estado en un proceso muy activo con la mayor parte de los trabajadores. Ellos, obviamente, tienen dudas, pero se han ido despejando. Si la empresa termina los contratos, los trabajadores quedan en primer lugar en el pago de sus liquidaciones y el resto de los acreedores se ponen a la fila", añadió Muñoz.
