Organizaciones judías recordaron a víctimas del atentado contra la AMIA en Buenos Aires
Al cumplirse el décimo aniversario del ataque que mató a 85 personas, familiares de las víctimas y grupos de personeros israelíes reiteraron sus críticas al ex presidente Carlos Menem y los servicios de seguridad argentinos.
A 10 años del atentado terrorista perpetrado en Buenos Aires contra la Asociación Mutual Israelita de Argentina (AMIA), varios actos recordaron a las 85 víctimas fatales del ataque, que aún no es aclarado por la justicia trasandina, cuyo accionar sigue siendo blanco de duras críticas por parte de los deudos.
En la capital argentina, al acto principal, celebrado frente al lugar donde se encontraba la AMIA, asistió el presidente Néstor Kirchner, aunque no subió al estrado ni se dirigió a los presentes. Tibios aplausos acompañaron la llegada del mandatario, quien por segundo año consecutivo asiste a la ceremonia.
Los familiares de las víctimas, de los casi 200 heridos y organizaciones judías han insistido en la poca diligencia de la justicia para indagar sobre el hecho, por el cual sólo están acusados tres personas sindicadas como la "conexión local" del crimen.
Sin embargo -recalcan-, permanecen al margen de la investigación los vínculos con Irán, país que aparece como el centro de operaciones del grupo que perpetró el atentado y que estaría vinculado al movimiento Hezbollah. De hecho, personeros israelitas en Argentina subrayaron que la bomba contra la AMIA fue un anticipo del terrorismo global que hoy enfrenta occidente.
También el ex presidente Carlos Menem -quien reside en Chile- es acusado por algunos sectores de ser parte de la operación de encubrimiento de los rastros iraníes de la matanza. Incluso un testigo que permanece en el anonimato aseguró que el político peronista recibió un soborno de 10 millones de dólares por este servicio, dinero que fue depositado en Suiza, lo cual no ha sido comprobado.
Las críticas de los judíos también apuntan a los servicios de seguridad, que en 1994 no fueron capaces de anticiparse al atentado, a pesar de que sólo dos años antes 25 personas habían muerto en un ataque similar contra la embajada de Israel en la capital argentina.
La representante de las víctimas del atentado, Roxana Levinson, dijo que "nuestras reclamaciones no pasan por lo económico sino por la exigencia de agotar la investigación judicial, la captura y la condena de los responsables".
"Se recibió una pequeña compensación material, pero esta no compensa en lo más mínimo la pérdida de nuestros seres queridos, y ni en lo más mínimo la falta de justicia y de verdad" sobre lo ocurrido, añadió.
En tanto en Israel, en la ciudad portuaria de Ashdod, donde reside una importante colonia de inmigrantes procedentes de Argentina, se celebró un acto en memoria de las víctimas en la plaza "AMIA". En la ceremonia participaron el presidente del grupo parlamentario de la coalición de Gobierno, Guideón Saar, la diputada laborista Colette Avital y el alcalde, Tzvi Zilker.
En el norte de Israel, que abarca las ciudades de Haifa, Afula, Naharía, San Juan de Acre y Nazaret, el acto central se llevó a cabo en la Plaza Argentina de la localidad de Carmiel.
En Jerusalén se desarrolló un acto en memoria de las víctimas que contó con la participación del alcalde, Uri Lupoliansky, y una delegación de jóvenes argentinos de visita en este país.
La Comisión de Inmigración y Absorción del Parlamento (Kneset), que preside la diputada Avital, recordará el atentado el próximo martes y el día 27 de este mes las víctimas serán honradas en la capital del desierto meridional del Néguev, Beersheba, donde residen unos 15.000 inmigrantes israelitas de origen argentino.