Celco: Gobierno amenazó con expulsión de activistas extranjeros
El Ejecutivo está a la espera de los antecedentes respecto de los ciudadanos foráneos que han participado en las manifestaciones para tomar las medidas correspondientes.
El ministro del Interior, Andrés Zaldívar, señaló el sábado que el Gobierno está a la espera de los antecedentes sobre las protestas del pasado jueves contra la planta de la empresa Celulosa Arauco y Constitución (Celco) para determinar la posible expulsión de los extranjeros que participaron en ella.
Zaldívar afirmó que dio "instrucciones para que cualquier extranjero que haya ingresado con visa turista y que se involucre en cualquier acto que afecte el orden público y comprobados los hechos, se le suspenda la visa y sea expulsado".
El secretario de Estado añadió que "no vamos a permitir que vengan a participar en desórdenes contra el orden público", según publica El Mercurio.
En la protesta del jueves 22 de junio participaron cinco extranjeros. Dos de ellos, Mario Carneiro (brasileño) y Leo Silva (argentino), abandonaron el territorio nacional de manera voluntaria.
Otros tres, dos brasileños y una argentina, permanecen en Chile y, según Greenpeace, saldrían del país este domingo.
Nuevas protestas
El sábado, unas 500 personas marcharon hasta la entrada de la planta de Nueva Aldea, cuestionada por los efectos contaminantes que puede tener su entrada en funcionamiento sobre las aguas del río Itata y la zona litoral de Cobquecura.
Esto debido a que aseguran que no se consideraron todos los antecedentes geológicos al momento de autorizar que los deshechos lleguen al mar a través de un ducto.
El mismo sábado, la Comisión Regional del Medio Ambiente (Corema) del Biobío postergó la entrada en funciones de la planta Nueva Aldea hasta que no se cumplan todas las exigencias técnicas.
En Argentina, en tanto, cientos de personas también protestaron en Gualeguaychú por la instalación de las papeleras de capitales europeos en la ciudad uruguaya de Fray Bentos y por la planta de Celco en la Octava Región.
A las polémicas respecto de Celco Nueva Aldea se sumó el martes un nuevo estudio independiente respecto de la planta Valdivia de la empresa, que la sindica como responsable directa de la muerte y migración de cisnes de cuello negro en el santuario de la naturaleza "Carlos Andwanter".
El análisis fue encabezado por el geoquímico Sandor Muslow, director del Instituto de Geociencias de la Universidad Austral, y en él se establece que la mortandad de las aves es consecuencia del derrame de 40 toneladas de sulfato a las aguas del río Cruces.
De acuerdo al informe, la contaminación de las aguas hizo que desapareciera la Egeria densa (luchecillo), principal alimento de las aves.
El estudio, publicado el pasado martes 20 de junio por la revista estadounidense Ética en Ciencias Ambientales y Políticas, fue financiado con aportes del Fondo de Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondecyt) y del Núcleo Milenio Forecos y se le considera el análisis más acabado y concluyente sobre la materia. (Cooperativa.cl)