Uruguay aceptó dialogar, pero no negociar con Argentina sobre papeleras

Publicado:
Autor: Cooperativa.cl

Montevideo sigue condicionando la negociación a que finalicen los cortes de rutas entre ambos países, los cuales son protagonizados por ciudadanos argentinos.

El gobierno uruguayo confirmó este viernes que accedió a entablar un diálogo directo con Argentina, pero especificó que sólo negociará cuando se levanten los cortes de los puentes que unen ambos países.

 

"Hemos aceptado iniciar el diálogo, pero la negociación sólo la entablaremos si se levantan los cortes", dijo el secretario general de la cancillería uruguaya, José Luis Cancela.

 

"Será un intercambio de puntos de vista, de interés común sobre el diferendo, pero sin asumir compromiso alguno, porque éste sólo vendrá cuando no haya cortes", agregó Cancela

 

El diplomático es el representante del presidente Tabaré Vázquez en el conflicto, creado por la instalación de una planta de celulosa de la empresa finlandesa Botnia en el municipio uruguayo de Fray Bentos, frente a las costas argentinas.

 

El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, anunció que Argentina y Uruguay habían llegado a un "entendimiento para iniciar un diálogo directo" con el apoyo de España.

 

Moratinos explicó que los representantes personales de los presidentes de Argentina y Uruguay accedieron a mantener una reunión en España (sin fecha concreta) "para abordar todos los aspectos de la cuestión" que enfrenta a ambos países.

 

No obstante, Cancela señaló que en España se va a hablar de forma directa, algo que hace meses que no se logra, pero reiteró que "a la negociación no se llegará hasta que las fronteras estén libres".

 

El propio Moratinos destacó que "este encuentro despejaría el camino a una negociación cuando se den las condiciones oportunas".

 

En la pasada Cumbre Iberoamericana, que se celebró en Montevideo del 28 al 29 de octubre, el rey de España, Juan Carlos I, accedió a la petición argentina de ejercer de "facilitador" en el conflicto, y designó al embajador Juan Antonio Yáñez-Barnuevo como su representante.

 

Yáñez-Barnuevo ha viajado tres veces al Río de la Plata, y de la última visita logró rescatar el compromiso de ambos gobiernos de entablar el diálogo directo.

 

Los ciudadanos de Gualeyguachú, en la orilla argentina, cortan intermitentemente desde hace un año, e ininterrumpidamente desde el

pasado noviembre, uno de los tres puentes sobre el río Uruguay, frontera natural entre ambas naciones.

 

Los habitantes de las ciudades argentinas de Colón y Concordia también hacen cortes parciales, bloqueando así todos los accesos que unen los dos países.

 

La empresa española Ence también pretendía instalar una planta de celulosa en Fray Bentos, pero finalmente decidió situarla en otra zona de la costa uruguaya, pero ya en el Río de la Plata, donde la distancia entre las dos orillas es diez veces mayor.

 

El conflicto ha llegado incluso a los tribunales internacionales.

 

Buenos Aires denunció a Montevideo ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya por presunta violación del Tratado del río Uruguay, por haber autorizado la instalación de la planta sin previa conformidad.

 

Posteriormente, Argentina pidió a la Corte que impidiera cautelarmente la construcción de la planta, solicitud que fue denegada.

 

Asimismo, Uruguay pidió al alto tribunal que exigiera a Argentina evitar los bloqueos de ruta, solicitud que también fue rechazada.

 

Anteriormente, el Tribunal Arbitral del Mercosur -formado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay- dictaminó que los bloqueos de ruta violaban las normas del grupo, que establecen la libre circulación de bienes y servicios por la región. (EFE)