¿Qué cambia con la salida de la marihuana de la categoría de "drogas duras"?
Médicos y parlamentarios reflexionan sobre las implicancias de su uso medicinal y recreacional.
"Va en la orientación positiva", dijo el ex ministro del Interior, Andrés Chadwick.
El Gobierno de Bachelet ha aclarado que la recalificación de la marihuana no es una prioridad.
La Ley 20.000 de Drogas afirma que la marihuana "es capaz de producir dependencia física o síquica y graves efectos tóxicos o daños considerables a la salud". Por eso está en la Lista 1 de las consideradas "drogas duras" y nuestra legislación no autoriza su uso terapéutico, como ocurre en otros países.
Todo eso está cerca de cambiar, a una firma de Michelle Bachelet. El decreto que dejó la renunciada directora del Senda, Francisca Florenzano, saca a la marihuana de la calificación de "droga dura", idea que coincide con la postura del actual Gobierno.
Uno de los principales argumentos técnicos de quienes abogan por la despenalización es el uso medicinal de la droga. Los diputados de la Comisión de Salud ya advierten la importancia de este punto en el debate.
"Existen muchos medicamentos que utilizan el principio activo de la cannabis y al sacarla de la lista 1 se podría comercializarlos en sí y trabajar hacia el autocultivo y, por lo tanto, el consumo regulado", planteó el diputado DC Víctor Torres.
"Un tema es incorporar ciertos medicamentos y la marihuana dentro de ciertos tratamientos de control de enfermedades, fundamentalmente las enfermedades más dolorosas, y otro tema es incorporar dentro de una política de flexibilización en el control de estupefacientes como política de salud pública", advirtió el UDI Javier Macaya.
El cambio legal facilitaría la vida a las personas que hoy necesitan la cannabis con fines terapéuticos.
El presidente del Colegio Médico, Enrique Paris, cree importante aprovechar "los estudios del extranjero para incluir algunos productos derivados de la cannabis sativa en el tratamiento de algunas patologías".
"Son sustancias derivadas de los cannabinoides, que tienen un efecto terapéutico positivo sin grandes efectos adversos y que, obviamente, mejoran la calidad de vida de las personas", explicó.
El ámbito penal
Por otro lado, se insiste también en que la marihuana no sea vista en términos recreacionales como una sustancia inocua, con la que no pasa absolutamente nada.
En materia penal, hoy la ley chilena no sanciona el consumo personal y en privado de la cannabis, pero si el consumidor es sorprendido debe probar que es para él solamente.
Francisca Florenzano explicó que el segundo cambio de la marihuana, dejando la Lista 1, terminará con esta persecución penal. Agrega que ésta no se va a focalizar en los individuos, sino en los traficantes.
El ex ministro del Interior Andrés Chadwick (UDI), recalca que habrá una flexibilización de las penas.
"Permite, por una parte, la utilización para efectos de salud y, segundo, permite una flexibilidad en el proceso penal en relación a las penas para quienes son consumidores. Creo que va en la orientación positiva. Es una modificación que perfecciona la Ley 20.000, la ley sobre drogas", afirmó.
Si una persona planta, cultiva o cosecha sin autorización plantas de marihuana, se arriesga a multa o prisión.
Leonardo Moreno, defensor nacional subrogante, asegura que la iniciativa es relevante, pero que la ley necesita una modificación más allá en materia de consumo.
"En términos de persecución penal, sólo significa una eventual rebaja en la pena. A mí me parece que hoy día tenemos un vacío que, de alguna manera, la jurisprudencia ha llenado, que es cómo hacemos posible ese consumo privado que no se sanciona, porque para poder consumir un cigarro de marihuana usted tiene que tenerlo, y resulta que para poder tener ese cigarro, usted tiene dos opciones: o lo cultiva, cuestión que está sancionada, o lo adquiere; cuestión que también está sancionada", reflexionó.
Con el decreto listo para ser visado, la ministra de Salud, Helia Molina, aclaró que éste será un tema a tratar, pero que no es una prioridad en el programa de la Presidenta Bachelet.