Sacerdote tras liberación de 1.800 reos: "Yo creo que es poco"

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Autor: Cooperativa.cl

Nicolás Vial, presidente de la Fundación Paternitas, criticó en Cooperativa la "cultura de castigo y exclusión" que, a su juicio, impera en Chile.

La Asociación Gendarmes expresó, en cambio, "preocupación extrema" por el explosivo aumento de las libertades condicionales.

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"Hay que trabajar siempre en la perspectiva de la salida, porque la condena pasa y los presos, tarde o temprano, saldrán a la calle", reflexionó Vial.

El sacerdote Nicolás Vial, presidente de la Fundación Paternitas, que promueve a la reinserción social de personas que han delinquido, se pronunció en Cooperativa a favor del explosivo aumento de la concesión de libertades condicionales a reos en proceso de cumplimiento de condena, que en la víspera desató una álgida pugna entre el Poder Judicial, el Gobierno y el Congreso.

"Por suerte las cortes de Apelaciones tienen una mirada ética. Dentro de un universo de 50 mil hombres y mujeres (que son parte del sistema penitenciario) salió el 4 por ciento, 1.800 personas. ¿Es mucho? Yo creo que es poco", dijo Vial en conversación con Una Nueva Mañana.

El religioso arremetió contra la "cultura de castigo, de no dar beneficios, de mantener a la gente totalmente excluida" que, en su opinión, impera en nuestro país.

A su juicio, "hay que trabajar con la gente (los presos) en la perspectiva de la salida siempre, no en la perspectiva de la condena, porque la condena pasa; siempre van a salir a la calle, tarde o temprano, y van a salir con todas las perversiones que les inocularon por un sistema inapropiado que tenemos en las cárceles chilenas".

En éste, planteó, "el hacinamiento es horroroso, un infierno, un oprobio permanente para la gente y eso no es ético; es totalmente contrario a la dignidad de las personas (...) Este hacinamiento perverso, lejos de ayudar, crea más violencia, más agresión y más odio a la sociedad".

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"Estamos siendo cuestionados cuando nuestra gente haciendo la pega como corresponde", dijo el presidente de la Asociación Nacional de Suboficiales y Gendarmes. (Foto: UNO)

 

"Para mí es más seguro que los 1.800 salgan hoy día a que sigan dentro de la cárcel en las condiciones que están; es mucho más peligroso para la sociedad que esa gente salga en dos meses que salga hoy día", señaló Vial.

"¿Por qué este terror frente a la salida de la gente? Cuando se trabaja bien hay éxito", agregó el religioso, asegurando que, más allá de que "la crónica roja queda en la retina de las personas, (...) el 70 por ciento de las personas con las que trabaja la fundación Patérnitas se reinserta de forma exitosa en lo social, familiar y laboral"; números similares a los que obtienen organizaciones similares.

Gendames: Informes negativos no fueron considerados

Una mirada divergente ofreció Joe González, presidente de la Asociación Nacional de Suboficiales y Gendarmes (Ansog)"Nuestra postura es de preocupación extrema", señaló a Una Nueva Mañana, destacando que de las 20 mil personas que cada año "egresan del sistema carcelario el 60 por ciento reincide".

En esa línea, "nos preocupa que se libere a tal cantidad de personas que no han recibido ninguna asistencia focalizada, de intervención psicosocial que permita que vuelvan a la sociedad y sean de provecho", señaló.

González se cuadró además con la explicación difundida este lunes por la dirección nacional de Gendarmería en cuanto a que, respecto de los presos beneficiados por la libertad condicional, "gran parte de los informes fueron desfavorables y (éstos) no fueron considerados para aprobar o rechazar las postulaciones" por parte de las comisiones de las distintas cortes de Apelaciones a lo largo del país.

"Estamos siendo cuestionados nosotros, cuando nuestra gente haciendo la pega como corresponde", reclamó, señalando además que, en su opinión, "más del 80 por ciento (de los beneficiados) no debió haber salido en libertad, y no por un tema de ellos, sino porque el Estado chileno y los gobiernos de turno no les han dado las condiciones necesarias para que salgan a ser personas de provecho".

"Quizás si hubiese un sistema penitenciario consolidado nos estaríamos alegrando por que egresara tal cantidad de personas desde las cárceles en condiciones de volver a reinsertarse, pero no es así", sentenció.