Denuncian a policías que participaron en operativo contra medios en Argentina
Esto luego que personas irrumpieran y provocaran destrozos en las instalaciones del diario Tiempo Argentino y Radio América.
Así quedaron las instalaciones de ambos medios.
La Fiscalía especializada en casos de violencia institucional en Argentina pidió investigar a los policías que participaron del operativo en el que un grupo de personas irrumpió y provocó destrozos en las instalaciones del periódico cooperativo local Tiempo Argentino y Radio América.
La presentación de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) surgió después de que los trabajadores de la cooperativa Por Más Tiempo denunciaran que los uniformados "habrían incurrido en diversas omisiones a sus obligaciones como funcionarios policiales frente a la comisión de un delito flagrante", señala la página web del Ministerio Público Fiscal.
El titular de la Procuvin, Miguel Palazzani, y el coordinador del Área de Violencia Policial de esa dependencia, Maximiliano Medina, consideran que el accionar de los agentes policiales "puso en riesgo efectivo a los trabajadores de Tiempo Argentino y a las instalaciones del diario".
"Lo que se violentó, en definitiva, es el derecho en el que se asienta nuestro propio sistema democrático: el de la libertad de expresión, no sólo de los miembros de la cooperativa sino también de sus lectores, quienes ven afectado también su derecho a la información", señalaron Palazzani y Medina en su presentación.
Según la información reproducida por la Fiscalía, el pasado lunes, después de la medianoche local, cinco hombres, liderados por un empresario, que supuestamente compró ambos medios en enero, ingresaron en las oficinas en las que funcionan Radio América y Tiempo Argentino y rompieron instalaciones y equipamiento.
Los trabajadores del periódico, que no reciben sus salarios desde diciembre pasado, fueron desalojados del edificio y han apuntado también contra el operativo policial que custodió a los cinco hombres.
Sobre el episodio, Martínez Rojas dijo el lunes al diario Perfil que ingresó al periódico "autorizado por la Policía" y con "derecho de ser titular de la empresa con documentación en mano".
La irrupción violenta en los dos medios fue ampliamente repudiada en Argentina desde distintos sectores políticos y de la sociedad civil.