Trump niega presiones al ex director del FBI para que dejara de investigar la "trama rusa"
El abogado del mandatario leyó una declaración que indica que "jamás sugirió o dirigió" aquella orden a James Comey.
El ex funcionario testificó hoy ante el Senado estadounidense y señaló que el gobernante le exigió "lealtad".
Si se comprueba que Trump intentó obstruir la investigación de FBI podría enfrentar un juicio político.
Donald Trump "jamás sugirió o dirigió" al ex director del FBI James Comey para dejar de investigar a nadie respecto a la supuesta injerencia rusa en las elecciones de 2016 y los posibles nexos de su campaña con el Kremlin, aseguró el abogado del presidente, Marc Kasowitz.
En una declaración leída ante la prensa, Kasowitz negó que Trump pidiera -como testificó Comey este jueves en el Senado sobre sus conversaciones con el presidente- que "dejara pasar" la investigación a su ex asesor de Seguridad Nacional Michael Flynn, quien dimitió en febrero tras mantener contactos con representantes del Kremlin.
En el comunicado, filtrado primero a los medios antes de comparecer en la Cámara, Kasowitz negó también que Trump pidiera a Comey lealtad "ni en forma ni en sustancia".
Kazowitz, que acaba de ser contratado por el presidente para su equipo legal, matizó que "la Oficina del Presidente tiene el derecho de esperar lealtad de aquellos que sirven a la Administración".
El abogado consideró que sería apropiado determinar si Comey debe ser investigado por haber filtrado las notas tomadas para registrar el contenido de sus conversaciones con Trump, que calificó de "subrepticias, unilaterales y desautorizadas".
Comey admitió hoy haber filtrado el contenido de algunas de sus conversaciones con Trump a un amigo, para que éste las distribuyera en la prensa y aumentara la presión para nombrar a un fiscal independiente sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones de 2016, lo que ocurrió días después.
El abogado de Trump considera que el testimonio de hoy de Comey prueba que el presidente no es parte de la investigación sobre la posible colusión con Rusia de su campaña y que "ni un solo voto cambió" como resultado de la presunta intromisión rusa. En su comparecencia ante el Club Nacional de la Prensa de Washington no aceptó preguntas de los periodistas.
Las versiones de lado y lado
El ex director del FBI dijo ante el Senado que el verdadero motivo de su despido fue que Trump quería "de algún modo, cambiar (...) el modo en que se conducía la investigación sobre Rusia", algo tajantemente rebatido por el abogado Kasowitz.
Sin embargo, en el testimonio de Comey hay otras afirmaciones que, de comprobarse ciertas, podrían considerarse intentos de Trump de obstruir la investigación del FBI sobre la denominada "trama rusa": la supuesta intromisión de Moscú en las elecciones estadounidenses y su coordinación con la campaña del hoy gobernante. En dicho escenario, Trump podría enfrentar un juicio político.
"No, no. Siguiente pregunta", respondió atropelladamente y con malestar el magnate cuando se le preguntó sobre el asunto en una rueda de prensa el pasado 18 de mayo en la Casa Blanca.
Previamente, en una entrevista con la cadena NBC el 11 de mayo, Trump también aseguró que había cenado con Comey el 27 de enero, una semana después de su toma de posesión, porque el entonces director del FBI quería hablarle sobre su permanencia en el puesto.
"Quería tener una cena porque quería quedarse (en el cargo)", dijo entonces Trump, quien, requerido para que aclarara a petición de quién había sido la cena, respondió: "Creo que la pidió él".
Según Comey, fue el propio presiente el que lo llamó ese mismo mediodía para invitarlo a cenar y, aunque había asumido que iba a ser con más personas, al final estaban a solas ellos dos.
Los contactos entre Trump a Comey son considerados cuanto menos inapropiados, dado el conflicto ético que pudieran suponer debido a la investigación independiente del FBI sobre un asunto que pudiera llegar a salpicar al gobernante.
Una de las acusaciones más graves de Comey es que en la cena del 27 de enero Trump le pidió "lealtad", aunque evitó interpretar si ello supuso un intento de obstrucción a la Justicia, algo que -dijo- corresponderá determinarlo al fiscal especial designado para esta investigación, Robert Mueller.
"No lo hice", dijo Trump en una entrevista reciente con Fox al preguntársele por aquello, aunque a continuación señaló que, de haberlo hecho, no habría sido "inapropiado".