Perdió su celular y ahora irá a la cárcel por almacenamiento de material pornográfico infantil
El imputado además es acusado de abuso sexual contra dos nietas, de cinco y ocho años.
Las menores eran parte de más de mil imágenes y videos que contenía el celular.
La policía incautó varias tarjetas de memoria con más de mil fotografías y videos pornográficos.
El hallazgo de un celular permitió la detención en Chillán de un hombre de 51 años acusado de abuso sexual en contra de dos menores de edad, además de producir y almacenar material pornográfico infantil.
El sujeto quedó en prisión preventiva tras su formalización la tarde de este viernes en el Tribunal de Garantía de Chillán.
El fiscal Eduardo Planck, señaló que "una mujer encontró en el Cementerio Municipal de Chillán un teléfono móvil y al buscar información para devolverlo se dio cuenta de la existencia de imágenes y grabaciones pornográficas que involucraban a menores de edad, dando aviso inmediato a la PDI".
De esta forma, a través de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales, se realizó un peritaje del equipo y se dio con la identidad y el paradero de su propietario.
El fortuito hallazgo de un celular puso poner fin a una serie de delitos de connotación sexual que un hombre de 51 años cometía contra dos nietas de su pareja, de 5 y 8 años, en Chillán. El imputado fue formalizado por el fiscal Eduardo Planck, quien logró su prisión preventiva. pic.twitter.com/Bo9i7XVulG
— Fiscalía Regional de Ñuble (@FiscaliaNuble) August 30, 2019
Las víctimas estaban a su cuidado
En la investigación se logró determinar que las víctimas eran las nietas de la pareja del imputado, de cinco y ocho años de edad, quienes estaban a su cuidado tras el fallecimiento de la madre biológica y que el celular se le extravió precisamente cuando visitaba la tumba de la mujer.
El fiscal precisó que "los delitos tienen pena de crimen, lo que afianza aún más la prisión preventiva que decretó el tribunal".
Además del teléfono, al hombre se le incautaron varias tarjetas de memoria con más de mil fotografías y videos pornográficos, que deberán ser revisados ante la eventualidad de encontrar nuevas víctimas.
El Juzgado de Garantía de Chillán decretó cuatro meses para la investigación.