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Corte ratificó 10 años de cárcel para sujeto que asesinó a su cuñada e intentó eliminar las pruebas

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Autor: Cooperativa.cl

Ruth Silva Hasell, de 67 años, fue asesinada con una botella de vidrio en el living de la casa.

El responsable, Raúl Blu Huepe, trasladó al cadáver a un dormitorio, limpió el domicilio y días después presentó una denuncia por presunta desgracia.

 ATON (Referencial)

El tribunal de alzada rechazó un recurso presentado por la defensa del imputado.

La Corte de Apelaciones de Chillán ratificó una condena de 10 años y un día de cárcel para un hombre de 60 años por el homicidio de su cuñada, crimen cometido a fines de abril de 2019 en la localidad Los Puquios, en la comuna de San Fabián.

En un fallo unánime, la primera sala del tribunal de alzada rechazó un recurso de nulidad interpuesto por la defensa de Raúl Blu Huepe, condenado como autor del asesinato por el Tribunal de Juicio Oral en Lo Penal de Chillán.

De acuerdo a los hechos acreditados, en horas de la noche del 26 de abril y de la madrugada del 27 de abril de 2019, Blu se encontraba en el domicilio de la víctima, Ruth Silva Hasell (67 años), donde "procedió a agredirla con un objeto contundente, ocasionándole múltiples heridas contuso cortantes y lesiones contusas, principalmente en el cráneo y rostro, lo cual le causó un trauma encéfalo craneano complicado, provocándole la muerte".

El fallo de la Corte señala que los magistrados de primera instancia "logran arribar a una decisión de condena tomando en cuenta indicios que estiman son múltiples, atento también al rito de la prueba de cargo también analizada, respecto de evidencias materiales y objetos encontrados en el sitio del suceso".

Se trata de elementos "íntimamente vinculados a la comisión del delito, particularmente al momento de su ejecución, que conducen a concluir que Raúl Blu Huepe sí tuvo efectiva participación cuando acomete a la víctima".

El fallo precisa que el arma usada para la comisión del delito fue una botella de vidrio.

Huellas y sangre

El Ministerio Público además presentó como evidencia en primera instancia un informe pericial del sitio del suceso, donde se halló una huella plantar levantada en la cocina de la víctima, que coincidía con zapatos del imputado, pruebas periciales de ADN en la lavadora de la víctima, donde se halló sangre de la mujer y del imputado, y testimonios de familiares que acreditaron que el sujeto fue la última persona que compartió con la mujer.

Según determinó la investigación, el sujeto dio muerte a su cuñada en el living comedor de la casa de ésta y trasladó el cuerpo hasta el dormitorio, dejándola en el suelo. Luego limpió toda la casa y dos días después realizó una denuncia a Carabineros por presunta desgracia.