Aprueban más de 1.234 millones para combatir la polilla de la vid en zonas urbanas de Ñuble
El SAG busca resguardar las producciones de frutas, especialmente de exportación.
Se establecerá un laboratorio para producir controladores biológicos contra la Lobesia botrana.
El control de la Lobesia botrana permite resguardar riesgos de perder mercados internacionales, sostienen productores locales.
El Consejo Regional de Ñuble aprobó más de 1.234 millones de pesos para la implementación de un programa bianual para la erradicación de la plaga Lobesia botrana o polilla de la vid en zonas urbanas de la región.
Se trata de un programa del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) principalmente enfocado en el resguardo de producciones frutícolas de vides y arándanos, que incluye un laboratorio para producir controladores biológicos.
Eduardo Jeria, director del SAG Ñuble, explicó que la agricultura genera casi un tercio de las exportaciones de Ñuble, y "el control de la Lobesia Botrana en el sector urbano, permitirá disminuir los riesgos de perder mercados tan importantes para nuestras frutas de exportación, como lo son Estados Unidos, Canadá y Corea".
El seremi Juan Carlos Molina, de la cartera de Agricultura, agregó que "esto abre buenas oportunidades para seguir exportando productos frescos a los mercados más exigentes del mundo, con beneficios como el aumento en los precios y la certificación orgánica".
Mauro Magnasco, gerente general de la empresa El Torreón Export, manifestó que la ausencia de la Lobesia botrana es una de las maneras más eficaces de mejorar la calidad y le libera las alas al arándano orgánico, que sí puede viajar a Estados Unidos, donde está el mayor volumen de consumo del mundo de este producto".
Impacto de la plaga
Como plaga cuarentenaria, la Lobesia botrana puede provocar limitaciones a las exportaciones, como ocurrió en el año 2013, cuando se detectó en arándanos destinados a Estados Unidos.
A raíz de lo anterior, dicho mercado exigió que los envíos de la fruta de Ñuble y Biobío estuvieran fumigados con bromuro de metilo, lo que obligó a los productores orgánicos a buscar otros destinos para estos productos.
Recién en octubre de 2020, Estados Unidos aprobó el Systems approach, un conjunto de medidas de manejo del riesgo de incidencia de plagas en los huertos, que permite garantizar las condiciones fitosanitarias de dicho mercado.
Es así como más de 90 huertos de Ñuble se incorporaron al sistema, un tercio de los cuales fueron productores orgánicos, a quienes se abrió una nueva opción comercial.