Chileno y su familia ucraniana arribaron a Chillán huyendo de la guerra: "Nos vinimos con lo puesto"
Se trata de José Palma, quien regresó a la zona después de 50 años en la ex Unión Soviética, donde trabajó como mecánico.
Llegó acompañado de su esposa, su hijo y su pareja, y una nieta.
Desde el municipio de Chillán se está coordinado una red de apoyo solidario.
Tras casi medio siglo años en Europa, José Palma y su familia ucraniana se transformaron en los primeros refugiados en Chillán por causa de la guerra.
Se trata de un mecánico que emigró a inicio de los años 70 por razones laborales, instalándose en la ciudad de Zaparoye, donde conoció a quien hoy es su esposa, Ana Kisil, conformando una familia que además integran su hijo Iván, su nuera María Semeskko y su nieta Alisa, de tres años.
El conflicto bélico entre Ucrania y Rusia los obligó a tomar la decisión de dejar su hogar y arribar a la capital de Ñuble, donde los recibió su hermana Rosa Palma.
"Pasamos de Ucrania a Polonia, donde nos llamaron desde la Embajada chilena y nos invitaron a que saliéramos del país, por todo el peligro que había. Lo dejamos todo, nos vinimos con lo puesto", rememora José Palma.
La salida del país no fue fácil, ya que Iván de 30 años debía quedarse para ser parte del improvisado ejército ucraniano al ser considerado conscripto, momento en el cual apelaron a su pasaporte chileno para emigrar.
"Estuvimos en cuarentena siete días y apenas la cumplimos viajamos a Chillán, aún no he visto mucho, pero lo que he visto me gusta y se parece un poco a la ciudad en la cual estábamos", dijo el joven.
Ayuda solidaria
El Municipio de Chillán, a través de su Dirección de Desarrollo Comunitario, se puso ya en contacto con esta familia, para poner a su disposición una red de apoyo para que se instalen a vivir en la ciudad.
El alcalde Camilo Benavente señaló que "debemos darles una recepción solidaria, producto de un momento muy difícil que han vivido, con una crisis emocional muy dura. Pretendemos entregar las herramientas desde el municipio y articular con otros servicios para que ellos puedan tener una vida más tranquila. Esperamos ayudarlos con vivienda y otras áreas".
La directora de Dideco, Zoraya Martínez, agregó que "nuestra idea es entregarles algunas herramientas para que comiencen a desarrollar su vida en la ciudad como un lugar donde vivir, a través de una asesoría y opciones de trabajo".