Profesora vende fotos eróticas y quiere entrar a un reality: Apoderados piden su despido
La docente de enseñanza básica ha causado escándalo tras sus publicaciones de redes sociales.
"No voy a renunciar", anunció mediante un video.
Una profesora de la localidad argentina de Campana está en el centro de la polémica, pues los apoderados del colegio en que trabaja pidieron que la despidan. Según alegan, la docente vende fotos y videos eróticos en una plataforma para adultos.
El problema con Miguelina Fredes se remonta al primer día de clases de este año, según informa TN, cuando la docente dijo sentirse mal horas después de iniciar sus lecciones como profesora jefe, en un curso de enseñanza básica. Desde ese momento, la mujer se retiró y pidió licencias médicas.
De acuerdo con la versión de los apoderados, en medio de las licencias de Fredes, se dieron cuenta que la joven vendía contenido al desnudo en sus redes sociales, donde suele publicar imágenes subidas de tono.
"Que haga lo que quiera con su vida privada, pero si trasciende y ella la hace pública pasa a ser incompatible con la docencia", opina uno de los apoderados denunciantes: "Mi hija de 8 años la vio el primer día de clases y cuando volvió. En total estuvo una semana (trabajando). Pero en las redes publica todos los días", agregó.
Ambiciones en la TV
Los padres también siguieron a la profesora en TikTok y se enteraron que postuló al conocido reality "Gran Hermano", programa que estaba haciendo un casting masivo por las redes sociales.
"Mi forma de ser, en las redes sociales y diferentes lugares, no se condice con lo que la sociedad cree que debe ser un profesor", señaló la mujer de 28 años en el video en que se presentó.
Miguelina dijo estar "buscando otros espacios. Estoy estudiando sicología social y me falta una materia para recibirme de licenciada en Educación. Pero mi pasión es el teatro. (Entrar el reality) es la oportunidad de mi vida, de ser tal como soy".
Tras las críticas, la profesora se descargó durante 18 minutos, explicando que padece "problemas patológicos" y actualmente trabaja en tareas administrativas en el colegio. Eso sí, dejó un mensaje claro: "No voy a renunciar".
Según Fredes, no pudo soportar la "presión" de seguir siendo profesora, no por la enseñanza ni por los niños, sino que por los apoderados, los chismes y comentarios en su contra: "No voy a volver a trabajar con chicos. Los niños son un amor, pero están los padres detrás y cuestionan todo".