El complejo volcánico Nevados de Chillán lleva seis años de erupción continua
Actividad constante ha generado la aparición de un nuevo cráter denominado Nicanor, que hoy mantiene en alerta amarilla la zona turística.
El Complejo Volcánico Nevados de Chillán -ubicado en la cordillera de Los Andes en la Región de Ñuble, en el límite de las comunas de Coihueco y Pinto- presenta actividad eruptiva hace 650.000 años y en tiempos históricos existen varios registros de actividad volcánica. Actualmente se encuentra en erupción desde enero de 2016, lo que ha generado la aparición de un nuevo cráter denominado Nicanor, que hoy mantiene en alerta amarilla la zona turística con pulsos eruptivos explosivos y otros poco visibles para la población.
Felipe Aguilera, director del Instituto Milenio de Investigación en Riesgo Volcánico y académico de Geología de la Universidad Católica del Norte (UCN), es enfático: "El Complejo Nevados de Chillán no solo está activo, sino en erupción continua desde inicios de 2016, por lo tanto, lo que estamos viendo es la manifestación visible de un proceso eruptivo permanente".
Y Javiera Caro, estudiante de magíster en Geología de Ckelar Volcanes, quien realiza su tesis de grado específicamente en Nevados de Chillán, plantea que la actividad del último fin de semana es algo esperable y recurrente, "pero llama la atención porque la altura de la columna eruptiva llegó a casi los dos mil metros y esta vez se dispersó al suroeste, es decir hacia el lado chileno (por el viento). Generalmente la columna eruptiva se va hacia al sureste (Argentina)".
Nevados de Chillán tiene un ciclo eruptivo cuya actividad no es siempre visible, como sí ocurre con volcanes en Hawai, donde sale lava prácticamente 20 días seguidos, y se ve una erupción claramente. Aguilera explica que "en Chillán el proceso eruptivo se ha caracterizado por explosiones ocasionales de pequeña y mediana magnitud desde hace seis años, formando varios cráteres. Uno de ellos comenzó a formar un enorme domo de lava (este crece y se destruye con erupciones), que terminó en un fuerte pulso eruptivo este fin de semana".
Los domos de lava, argumentan los expertos, son de mayor riesgo porque generan un "tapón" en el volcán, cuya presión propia de la actividad volcánica no se puede liberar fácilmente. "Esto puede desencadenar una explosión de mayor magnitud, que es el principal peligro asociado, ya que en las cercanías del volcán encontramos centros turísticos como el hotel Termas de Chillán y canchas de esquí, entre otros, los que pueden recibir caída de cenizas desde el volcán", asegura Javiera Caro.