Marco Antonio Ávila se mantuvo en el Ministerio de Educación pese a sus polémicas
La gestión del titular del Mineduc ha sido cuestionada debido a su intento de disminuir los recursos de los Liceos Emblemáticos y a la alta deserción escolar.
El altercado que protagonizó esta semana junto a la diputada Viviana Delgado incluso le provocó un reto personal del Presidente Boric.
A pesar de que su gestión ha sido cuestionada casi transversalmente en su último año en el Gobierno, el ministro Marco Antonio Ávila sobrevivió al cambio de gabinete, permaneciendo a cargo de la cartera de Educación.
El militante de RD recibió la cartera justo a tiempo para viabilizar el retorno presencial a clases de la mayoría de los escolares, advirtiendo que "fue un error" mantener los colegios cerrados por tanto tiempo, lo que le ganó una disputa no menor con el Colegio de Profesores.
En efecto, según cifras del Mineduc, 50.529 estudiantes que estaban matriculados en 2021 no aparecieron como tal en 2022, número que era 24% mayor respecto de 2019, y si bien el Gobierno intentó abordar la deserción con un plan de recuperación, la efectividad de tal estrategia fue considerada muy baja por sus críticos.
Otro fenómeno que Ávila debió enfrentar al comienzo de la gestión fue una "explosión" de violencia escolar que se registró en distintos establecimientos del país, que si bien fue controlada en gran parte, persiste en los liceos emblemáticos de Santiago.
Casi al cierre del 2022, el ministro anunció que el programa de Liceos Bicentenarios no continuaría "como se le conoce" durante este Gobierno, convirtiéndose en blanco de cuestionamientos particularmente en la oposición, que acusó una decisión "ideológica".
No obstante, durante los últimos días de la discusión del Presupuesto 2023, el Mineduc firmó un acuerdo con los parlamentarios para restablecer los recursos que serían reducidos para estos establecimientos, calmando las aguas.
Meses después, la gota que parecía rebalsar el vaso fue su encontrón con la diputada ecologista Viviana Delgado, por el que si bien ofreció disculpas públicas, la UDI pidió su renuncia, y el Presidente Boric incluso admitió haberlo reprendido, al tiempo que negó que el hecho hubiese sido un factor para el rechazo de la reforma tributaria.
Debido al grueso de su desempeño en el Mineduc, Ávila fue interpelado a mediados del año pasado, y parlamentarios de oposición amenazaron con hacerlo de nuevo durante este mes.
GOBIERNO: LA EVALUACIÓN ESTÁ A LA VISTA
Frente a la decisión de mantener a Ávila, la ministra Camila Vallejo expresó que "esto es parte del diseño del Presidente, lo que ha presentado ante el país es parte de lo que responde a la evaluación que hizo cartera por cartera y el resultado de la evaluación está acá a la vista".
Vallejo agregó que "hay una decisión política de mantener y respaldar al ministro de Educación en la tarea que le ha encomendado, que es la principal, de poder generar la reactivación educativa que nuestras escuelas necesitan".
Sobre esos temas, la ministra explicó que "no es sólo respecto al ausentismo escolar, sino que también de la recuperación de los aprendizajes, de la atención a la salud mental, de la convivencia escolar. Y en eso ha estado abocado y seguirá estando abocado en su gestión nuestro ministro de Educación, independiente del altercado que todos conocimos y en eso ha sido muy claro el Presidente. El resultado de la evualación está a la vista".