La próxima misión de vuelo espacial tripulado Shenzhou-12 tiene como objetivo verificar en órbita las principales tecnologías para construir y operar la estación espacial de China, según informó hoy miércoles la Agencia de Vuelos Espaciales Tripulados de China (CMSA, siglas en inglés).
Las tecnologías que se probarán incluyen aquellas relacionadas con la estadía de largo plazo de los astronautas, el reciclaje y el sistema de soporte vital, el suministro de materiales espaciales, las actividades y operaciones extravehiculares, y el mantenimiento en órbita, detalló Ji Qiming, director adjunto de la CMSA, en rueda de prensa.
La nave Shenzhou-12 será enviada al espacio a las 9:22 de la mañana del jueves (hora de Beijing) desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Jiuquan en el noroeste de China, explicó Ji.
Esta será la primera misión tripulada durante la construcción de la estación espacial de China y los astronautas permanecerán en órbita durante tres meses, agregó Ji.
Con la ayuda de un brazo mecánico, los astronautas realizarán actividades extravehiculares durante un tiempo relativamente largo para realizar una serie de operaciones, incluida la instalación y el mantenimiento de equipos, informó Ji.
A su vez, el sistema de transporte espacio-Tierra para misiones espaciales tripuladas será probado más a fondo como parte de la misión, agregó.
La versión mejorada del cohete portador Gran Marcha-2F tiene una mayor confiabilidad y seguridad, mientras que la nave espacial tripulada Shenzhou-12, también actualizada con respecto a versiones anteriores, tiene nuevas capacidades tales como encuentro y acoplamiento autónomos rápidos, y encuentro y acoplamiento en sentido radial, así como la posibilidad de permanecer acoplada en órbita por hasta 180 días, explicó Ji.
Durante la misión se llevarán a cabo aplicaciones y experimentos espaciales en múltiples campos y, por primera vez, se examinarán las capacidades de búsqueda y rescate de los astronautas en el sitio de aterrizaje de Dongfeng, en la región autónoma de Mongolia Interior, en el norte de China, afirmó Ji