Investigadores de Ingeniería Estructural y Geotécnica, de Diseño-Ingeniería y de Mecánica y Metalúrgica de la Universidad Católica (UC), desarrollaron un sistema de aislación sísmica para contenedores de líquidos, orientado a proteger los estanques de vinos frente a nuevos terremotos.
La innovación apoyada por la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt), mediante el Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondef), espera revertir las pérdidas millonarias de la industria vitivinícola tras los eventos sísmicos que afectan recurrentemente al país.
"Lo últimos terremotos demostraron que los estanques de acero inoxidable de pared delgada para la guarda y fermentación de vino son estructuras sísmicamente muy vulnerables", señaló José Luis Almazán, académico de Ingeniería Estructural UC y director del proyecto.
Agregó que durante el terremoto del 27F falló al menos uno de cada cuatro contenedores que estaban llenos de vino, afectando parte o la totalidad del contenido. Esto significó una pérdida de 125 millones de litros, equivalente al 12,5% de la producción del año 2009.
"El daño pudo ser mucho mayor, ya que el sismo ocurrió poco tiempo antes de la vendimia, por lo cual menos del 50% de la capacidad de almacenamiento estaba realmente utilizada", precisó Almazán.
El nuevo sistema
El sistema consta de un conjunto de dispositivos flexibles que se instala en los soportes del contenedor, lo que produce un efecto de aislamiento. "La idea es que la energía del sismo sea absorbida por dispositivos de aislación de vibraciones", explica el experto.
En un modelo a escala, el equipo de investigación demostró como la energía de un sismo se transfiere al sistema de aislamiento, formado por dispositivos capaces de aislar tanto los movimientos horizontales como verticales del suelo.
"Esta tecnología permite filtrar las ondas sísmicas, de modo tal que la energía que llega al estanque en sí, es mucho más baja", destacó el académico.
Los investigadores indican que el sistema se puede escalar al tamaño y peso que se necesite proteger. Además es igualmente efectivo para proteger equipos industriales en general.
"Gran parte del trabajo que llevamos a cabo, apunta a disponer de dispositivos comercialmente atractivos. La idea es que el costo de protección sísmica, que se realiza una sola vez, esté entre un 2% y 5% de la inversión total del contenedor", sentenció Jose Luis Almazán.
Para 2018
Desde el año pasado, los expertos están trabajando en el proyecto tecnológico con la empresa Tersainox S.A., fabricante de estanques de acero inoxidable, con el objetivo de que los sistemas de protección sísmica vengan incorporados en las estructuras.
En 2018 se espera salir al mercado con los nuevos dispositivos y otras tecnologías antisísmicas.
Aunque menos conocidos, los daños producidos en la industria cervecera fueron a su vez cuantiosos luego del 27F. Según datos obtenidos, la compañía CCU sufrió una pérdida de 20 millones de litros de cerveza en su planta de Quilicura en Santiago.
En menor escala, los productores de vino y pisco de la Región de Coquimbo también resultaron afectados por el terremoto de Illapel en 2015.
La iniciativa cuenta además con la participación de Constanza Miranda y Catalina Cortázar, académicas de Diseño-Ingeniería y de Mecánica y Metalúrgica UC, respectivamente.