Naciones Unidas dio este jueves su primer paso hacia la gobernanza internacional de la inteligencia artificial (IA) al crear un Consejo Consultivo de IA que trabajará de forma "independiente y rápida", ya que según el secretario general de la ONU, António Guterres, tendrá que funcionar a "contrarreloj".
Guterres apuntó en una rueda de prensa que este órgano asesor de alto nivel tiene un equilibrio de género -20 mujeres y 19 hombres-, es geográficamente diverso -participan 33 países- y abarca distintas generaciones.
En este "comité de sabios" hay representantes de diversos Gobiernos, como Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e IA de España; así como del mundo académico, como es el caso de Paolo Benanti, profesor de la Pontificia Universidad Gregorian, y representantes de titanes de la tecnología como Sony, Microsoft, Google, y OpenAI.
Todos los miembros fueron parte de una convocatoria abierta a la que se presentaron 1.800 personas.
La primera reunión de este órgano será el viernes y, en general, el Consejo Consultivo hará recomendaciones a finales de este año en tres áreas: la gobernanza internacional de la inteligencia artificial, los riesgos y desafíos de esta tecnología y, por último, las oportunidades para aprovechar la IA para acelerar el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Asimismo, Guterres señaló que las recomendaciones de este consejo contribuirán a los preparativos de la Cumbre del Futuro del próximo septiembre y, específicamente, a las negociaciones en torno al Pacto Digital Mundial propuesto.
POSIBLES BENEFICIOS Y PROBLEMAS DE LAS IA
Guterres lleva meses advirtiendo de los posibles beneficios y problemas que pueden suponer la IA, sobre todo desde que el chatbot ChatGPT, de OpenAI, alcanzó popularidad en noviembre del año pasado, lo que ha dado pie a un "boom" de otras aplicaciones que usan la IA para clonación de voz o generadores de imágenes, entre otras muchas.
"Gracias a una de esas aplicaciones, tuve la experiencia surrealista de verme pronunciar un discurso en un chino impecable, a pesar de que no hablo chino", comentó Guterres para ejemplificar una de las posibilidades y peligros de la IA.
Entre las posibles ventajas de esta tecnología, el secretario general dijo que la IA podría ayudar a potenciar la acción climática y los esfuerzos para alcanzar los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para 2030.
"Pero todo esto depende de que las tecnologías de IA se aprovechen de manera responsable y se hagan accesibles a todos, incluidos los países en desarrollo que más las necesitan", añadió.
En lo referente a los potenciales daños de la IA, Guterres dijo que le preocupa su uso para la desinformación, la invasión de la privacidad, el fraude y otras violaciones de los derechos humanos.
"Sin entrar en una serie de escenarios apocalípticos, ya está claro que el uso malintencionado de la IA podría socavar la confianza en las instituciones, debilitar la cohesión social y amenazar la democracia", señaló el secretario general.